"Vitoria" unilateral del COB

El Rio Ourense Termal sumó su primera victoria con la virulencia del que tiene prisa por ganar ya la tercera. Como si intentasen los locales reclamar alguno de las derrotas anteriores aumentó lo méritos del partido que tenían delante.

Lástima que la liga no conceda ese tipo de premios. Porque ayer el COB rubricó un partido intachable. Con protagonismo para lo más vistoso, el ataque, pero sobresaliente también en defensa. Un COB que llegaba al borde de la inanición y capaz de comerse al contrario en dos bocados. El Araberri sobrevivió en el primer cuarto con el acierto puntual de Wintering y Mitrovic, pero acabó bajando los brazos y la mirada ante un rival con más intensidad en cada acción.

Orlov y Ndoye compitieron por ser el mejor interior sin capacidad para elegir solo a uno. Por fuera Reggie Johnson supo correr, generar y encarar el aro con acierto; Ahonen jugó siempre un décima antes que sus defensores y Trist y Manzano hicieron cada vez lo que el equipo necesitaba.

Pero la diferencia la marcó el engranaje. Maura desde el inicio y Moreno o Kohs cada vez que pisaron la pista. Sin dos ataques malos seguidos, sin un rebote que no tocasen o capturasen y sin una defensa que no obligase a un esfuerzo extra al rival. Martín Rodríguez es el que falta por soltarse. Quizá el miércoles.

A la segunda dentellada se rompió el partido (52-32, min.18) y en la tercera reclamaron confianza plena en lo que estén haciendo cada día (72-46, min.27).

Entre Gonzalo García de Vitoria, Miguel González y Chema Royo le han puesto orden, confianza y físico a un COB que confirmó los 30 minutos buenos de Oviedo con una victoria ilusionante.

Disfrazando de equipo asequible a un Araberri que aspiraba hace una semana al liderato y anunciando una incuestionable capacidad para multiplicar al ritmo que otros suman. Es solo la primera y la clasificación pica para arriba, pero jugando así queda claro que llegarán más.

Está hecho lo más complicado. Queda continuar y ahora tocan dos partidos más en el Pazo. El miércoles llega el Básquet Coruña y el sábado el Valladolid. Cada uno más complicado que el anterior, pero los tres en rojo para un COB que definirá ahí su hoja de ruta. El pasado lo deja sin mucho margen de maniobra, pero quién piensa ahora en eso con tan buen sabor de boca.