Cartas al director

Mónica

Hace unos días escuché en la radio una entrevista a la nueva ministra de Sanidad, Mónica García. Nunca me ha gustado la verborrea vacua e insustancial, ni en un político ni en una conversación de taberna. En esto se parece esta mujer a su mentor en Más Madrid, Iñigo Errejón, a quien cuando habla parece que le hayan dado cuerda igual que esos muñecos de feria que hablan sin parar una vez puestos en marcha.

Preguntada sobre si piensa prohibir fumar en las terrazas dice que casi seguro que sí, no sólo ahí sino también en la mayoría de espacios públicos. A continuación le hace el periodista un reconocimiento de la labor de ella como defensora de la sanidad pública, y sin dilación le pregunta si la sanidad privada tiene que echarse a temblar ahora que ella es la nueva ministra. Responde sin inmutarse que ella es también partidaria de la sanidad privada, que cumplimenta a la pública y hace una buena labor. Y yo añado que si hay que poner una vaca pintada de verde en cada quirófano o habitación la señora ministra la pondrá, quien dice de verde o de azul, o de amarillo, por verborrea que no quede.

Con el problema medio-ambiental que hay lo pertinente es suprimir los coches de particulares y convertir las ciudades en espacios verdes. En nuestro entorno, en Europa, las ciudades son así, libres de humos contaminantes. Pero claro, aquí con eso no se atreven, aquí empiezan por prohibir fumar en el espacio público, con el pretexto de seguir los pasos de Europa, y el resto que se apañen.

Se lo están sirviendo en bandeja de plata a Ayuso ,y créanme si les digo que dan ganas de votarla. Al menos Ayuso no engaña a nadie, va de frente. Lo de Mónica es verborrea barata para salir del paso.