Los vecinos de Barbadás protagonizaron un desconsolado cortejo fúnebre lleno de llantos y gritos de dolor iluminados con la luz de las velas
Para despedirse del Entroido, los vecinos del Concello de Barbadás procedían ayer al tradicional desfile fúnebre y la posterior "queima do meco".
A las 19,00 horas, la Praza Vella, de A Valenzá, acogió el concurso de Mecos. Hora y media más tarde, el desfile del "Enterro da Sardiña" partió desde la glorieta de entrada a la Valenzá, para transcurrir por la avenida de Celanova hasta la Praza Vella. Las lágrimas y las muestras de dolor no cesaron en ningún momento de la velada, iluminada con la luz de las velas que los vecinos pasaron a recoger en la Casa de la Cultura minutos antes del inicio de la solemne procesión.
La "queima do meco" que lleva colgado en A Valenzá acompañando a sus habitantes durante todo el Entroido y la de los Mecos participantes en el concurso, excepto el ganador que se hizo con el indulto, marcó el punto y final a días repletos de celebraciones y colorido.
Sin embargo, también hubo espacio para que los llantos se entremezclaran con algún que otro baile y carcajada. Isabel Risco se encargó de la animación, con la presentación de su espectáculo "Nabiza Girl" que contó la historia de una superheroina gallega.
