El "Alto da Raia" arroja pistas sobre la era de la Prehistoria

Un colectivo de siete arqueólogos lusos y españoles –de Romanarmy y de Era Arqueología- realizó a lo largo de los últimos días una prospección en el entorno conocido como Alto da Raia, entre Calvos de Randín y Montalegre. A falta de analizar y concluír las muestras e investigaciones en campo, todo parece indicar que en este punto existió un campamento militar romano y que, con anterioridad, hubo otra construcción previa prehistórica –de la edad del Bronce y del Hierro-. La parte norte del campamento y poblado anterior estaría ubicada en la zona del municipio gallego y la sur en Montalegre. En este primer trabajo de campo se trató de validar el interés arqueológico del lugar. En este sentido, se llevó a cabo una prospección geofísica y magnética para identificar posibles anomalías arqueológicas en el subsuelo, así como tres sondeos arqueológicos: dos perpendiculares a la muralla y otro en una anomalía que se reveló como una estructura de combustión y que permitirá arrojar una datación cronológica. “Todavía tenemos que procesar los datos y hemos tomado muestras, pero casi seguro sabemos que hay un campamento militar romano de carácter temporal que se sobrepuso a una ocupación previa”, explicó Joao Fonte, del colectivo de investigadores Romanarmy. “Se trataría esta última, posiblemente, de un pequeño poblado de la Edad del Hierro o del Bronce”, añadió el arqueólogo, que certificó la aparición de cerámica antigua. La estructura en forma rectangular del campamento estaba compuesta por un foso y un talud. “Cuando se construyó el campamento ya había habido otra ocupación anterior”, puntualizó Fonte. “Es un sitio muy excepcional para Galicia y norte de Portugal”, añadió. Pese a todo, el arqueólogo prefiere hablar con “cautela” hasta que se analicen y procesen todos los datos recogidos. “A partir de ese momento podremos decir que estamos absolutamente seguros, no obstante, todos los datos apuntan a ese sentido”, aseguró el arqueólogo portugués. “También nos ha aparecido, además de las cerámicas, algún material metálico que podría estar relacionado con las tachuelas de las sandalias romanas. Pero todavía tenemos que verificarlo”, añadió. Durante los próximos meses se procesarán los datos de campo, se enviarán las muestras para dataciones absolutas, se elaborarán dos memorias –para Galicia y Portugal- y se publicará un artículo científico al respecto. “Con todo esto en la mano se propondrá el desarrollo de nuevas campañas arqueológicas. No hemos agotado el potencial del lugar, sino que se ha desvelado su interés arqueológico”, fundamentó Joao Fonte. Tras los trabajos, los sondeos se han cubierto con geotextil y tierra.