La localización de cuatro focos del serotipo 4 (S-4) de la enfermedad denominada lengua azul, perteneciente a la familia Reoviridae, en los concellos de Castro Caldelas, Sarreaus, Fornelos de Montes y As Neves (dos positivos en animales de una misma explotación) llevaron a la Consellería do Medio Rural a aprobar la realización de una campaña preventiva que arrancará en marzo.
El programa consistirá en la vacunación de las reses con más de tres meses de las cabañas bovina y ovina, en las provincias de Ourense y Pontevedra, así como de los rumiantes domésticos de las comarcas veterinarias de Chantada, Terra de Lemos-Quiroga y Sarria. A su vez, los centros de limpieza y desinfección de vehículos dependientes del organismo desarrollarán un plan de desinsectación.
A partir de mediados o finales de abril, una vez finalizada la época libre del mosquito, el movimiento de animales se limitará a los procedentes de explotaciones vacunados o reses vacunadas o menores de tres meses que procedan de animales vacunados. Este transporte siempre será realizado en vehículos desinsectados antes de realizar la carga.
El anuncio lo hizo ayer Medio Rural, una vez informado el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), tal y como establece el plan de vigilancia de la enfermedad, y después de que el Laboratorio Central de Veterinaria de Algete, laboratorio de referencia nacional para este mal vírico, confirmase los positivos.
La sintomatología de la enfermedad es muy variada y puede presentarse a pesar de una total ausencia de signos clínicos hasta cuadros crónicos o agudos que pueden provocar la muerte del animal. En todo caso, las pérdidas económicas que ocasiona son muy importantes debido a los costes de los programas preventivos y de erradicación, así como de la vacunación y la restricción de movimientos de animales no vacunados.
El presidente de Agrogandeira do Macizo Central (Agromacen), un colectivo que aglutina a aproximadamente 400 productores, recibió el anuncio de la campaña comentando que “nos parece perfecta. O primeiro é previr e protexer ao resto da cabaña”. Pedro Rodríguez Parente hizo un llamamiento a la tranquilidad: “Non hai que crear alarma. É unha medida preventiva”. Seguidamente, resaltó que los ganaderos únicamente sufrirán los trastornos derivados de reunir al ganado para su vacunación.
La enfermedad fue detectada en Galicia durante los años 2008 y 2009, si bien, en aquella ocasión, la cabaña gallega sufrió las consecuencias del serotipo 8 (S-8), siendo erradicada mediante una campaña de vacunación. A partir de entonces, en el conjunto del Estado se desarrolla un programa anual continuo de vigilancia de la presencia de este mal, al objeto de detectar los posibles casos positivos.
Este programa de seguimiento contempla la vigilancia entomológica, consistente en la captura semanal de mosquitos a lo largo del año, pero también un control de los animales domésticos sensibles a la enfermedad. Este último aspecto prevé la realización de dos tomas de muestras anuales en un número de ejemplares pertenecientes a rebaños de ganado bovino que fueron seleccionados previamente. La detección de los cinco focos detectados en cuatro concellos gallegos fue posible gracias a este tipo de muestreo.
La lengua azul es una enfermedad vírica de carácter infeccioso pero no contagioso, pues no se transmite por contacto directo de los animales, sino que es causada por varias especies de mosquitos del género culicoides, que, tras haberse alimentado de reses infectadas, la pasan con su picadura a ejemplares sanos. Esta picadura tampoco es una zoonosis, pues no se transmite a las personas, ni por contacto con animales que dieron positivo, ni al consumir productos cárnicos.
