La Consellería de Medio Rural decretó la suspensión de cualquier tala en Congostro, en Rairiz, después de detectar que decenas de carballos, algunos centenarios, habían sido talados. El Seprona investiga para averiguar la autoría de las talas.
La detección de talas de decenas de carballos, algunos centenarios y de más de 1,4 metros de diámetro en las inmediaciones del espacio natural de As Veigas de Ponteliñares, en Rairiz de Veiga, llevó a la Consellería de Medio Rural a decretar la suspensión de cualquier tipo de poda o trabajo de aprovechamiento forestal en la zona de Congostro. La orden de Medio Rural se realiza de esta forma en aplicación de la normativa, que prohíbe expresamente esta tala en zonas objeto de concentración parcelaria, como es el caso de la aldea de Congostro.
Paralelamente, el Seprona y la Policía Autonómica comenzaron sus investigaciones para determinar la autoría de las talas y determinar responsabilidades y posibles autores. Además, la guarda forestal se mantiene alerta para detectar y sancionar, en su caso, nuevas talas indiscriminadas.
Fuentes vecinales indicaron que algunas talas, como la producida en una zona de Ordes y de Congostro incluyó el arranque de carballos desde o pé y su posterior traslado en un camión, supuestamente para su venta a alguna empresa maderera. Estas talas podrían estar motivadas por el interés de algunos propietarios de terrenos de la zona en vender la madera de los árboles de sus fincas antes del inicio del futuro inminente de parcelación en la zona, según destacaron varios vecinos.
Paralelamente, el Seprona y la Policía Autonómica comenzaron sus investigaciones para determinar la autoría de las talas y determinar responsabilidades y posibles autores. Además, la guarda forestal se mantiene alerta para detectar y sancionar, en su caso, nuevas talas indiscriminadas.
Fuentes vecinales indicaron que algunas talas, como la producida en una zona de Ordes y de Congostro incluyó el arranque de carballos desde o pé y su posterior traslado en un camión, supuestamente para su venta a alguna empresa maderera. Estas talas podrían estar motivadas por el interés de algunos propietarios de terrenos de la zona en vender la madera de los árboles de sus fincas antes del inicio del futuro inminente de parcelación en la zona, según destacaron varios vecinos.
