El desalojo de una veintena de sindicalistas de la CIG del salón de plenos de Xinzo acaparó el protagonismo en una sesión que aprobó, sólo con los votos del PP, la rebaja salarial y la revisión del convenio colectivo. El desalojo se produjo después de que los representantes sindicales exhibieran pancartas en contra de la medida, lo que provocó un enfrentamiento, llegando incluso a producirse un forcejeo entre los dos agentes que custodiaban la sala y el secretario comarcal de la CIG, Anxo Torres.
El pleno comenzó pasadas las once de la mañana. Los ediles, nada más aprobar las actas de dos sesiones plenarias anteriores y darse por enterados de los decretos de la Alcaldía, se metieron de lleno en el debate sobre la rebaja de un 6% en el sueldo de los trabajadores y la modificación de tres puntos del convenio colectivo -el que hace referencia a la movilidad laboral, el de régimen de retribuciones y el de régimen disciplinario-, medidas que cuentan con el apoyo de los sindicatos CC.OO. y CSIF. La CIG, sindicato mayoritario entre los trabajadores, apoyó la rebaja del sueldo, pero no comparte la modificación del convenio.
El debate ocupó dos horas, durante las que los grupos de la oposición (PSOE, BNG, Anova -Irmande Nacionalista-, Aidal-Alternativa Independiente de A Limia- y Apga- Alternativa Popular Galega) coincidieron en reprochar al grupo de gobierno que 'cargara' contra los trabajadores recortándoles derechos y bajándoles el sueldo y, por otro, que contratara a más personal, extremo que fue negado por Antonio Pérez.
Los portavoces de la oposición también criticaron duramente la política del PP referente a la contratación de trabajadores en Xinzo durante los últimos años. El alcalde concluyó el debate comparando el Concello con un barco que va a pique. '¿Seguimos así e deixamos que se funda ou tomamos medidas?', preguntó.
El momento fue aprovechado por los sindicalistas de la CIG, para exhibir pancartas contra la medida, lo que enojó a Antonio Pérez, que automáticamente ordenó a la Policía Local que desalojara el salón, produciéndose un forcejeo que duró apenas un minuto.
Los sindicalistas, una vez fuera del salón, abandonaron el Consistorio, mientras el alcalde, una vez finalizada la sesión, anunciaba que la Policía Local denunciará a Anxo Torres por desobediencia y resistencia a la autoridad. Antonio Pérez también aseguraba que está revisando las cámaras de vídeo que hay en el salón para denunciar a los manifestantes que corearon insultos durante el desalojo.
Pero estas no son las únicas denuncias, dado que el secretario de la CIG, Anxo Torres, tras lamentar el incidente, que, a su entender , fue provocado por el alcalde, cortándoles la libertad de expresión, anunció la presentación de dos querellas, una por 'conflicto colectivo', en la que argumenta que el grupo de gobierno tiene facultad para suspender el convenio colectivo pero no para modificar apartados y sustituirlos por otros. 'Tamén o vamos a denunciar para pedirlle responsabilidades penales por cambiar as normas as sabendas que non ten competencias para facelo', explicó Anxo Torres.
El debate ocupó dos horas, durante las que los grupos de la oposición (PSOE, BNG, Anova -Irmande Nacionalista-, Aidal-Alternativa Independiente de A Limia- y Apga- Alternativa Popular Galega) coincidieron en reprochar al grupo de gobierno que 'cargara' contra los trabajadores recortándoles derechos y bajándoles el sueldo y, por otro, que contratara a más personal, extremo que fue negado por Antonio Pérez.
Los portavoces de la oposición también criticaron duramente la política del PP referente a la contratación de trabajadores en Xinzo durante los últimos años. El alcalde concluyó el debate comparando el Concello con un barco que va a pique. '¿Seguimos así e deixamos que se funda ou tomamos medidas?', preguntó.
El momento fue aprovechado por los sindicalistas de la CIG, para exhibir pancartas contra la medida, lo que enojó a Antonio Pérez, que automáticamente ordenó a la Policía Local que desalojara el salón, produciéndose un forcejeo que duró apenas un minuto.
Los sindicalistas, una vez fuera del salón, abandonaron el Consistorio, mientras el alcalde, una vez finalizada la sesión, anunciaba que la Policía Local denunciará a Anxo Torres por desobediencia y resistencia a la autoridad. Antonio Pérez también aseguraba que está revisando las cámaras de vídeo que hay en el salón para denunciar a los manifestantes que corearon insultos durante el desalojo.
Pero estas no son las únicas denuncias, dado que el secretario de la CIG, Anxo Torres, tras lamentar el incidente, que, a su entender , fue provocado por el alcalde, cortándoles la libertad de expresión, anunció la presentación de dos querellas, una por 'conflicto colectivo', en la que argumenta que el grupo de gobierno tiene facultad para suspender el convenio colectivo pero no para modificar apartados y sustituirlos por otros. 'Tamén o vamos a denunciar para pedirlle responsabilidades penales por cambiar as normas as sabendas que non ten competencias para facelo', explicó Anxo Torres.
