La Xunta denegó una subvención a la sociedad Lipasa para la construcción de una fábrica de tortillas en Xinzo, lo que ha generado un gran malestar al promotor y el propio Concello. Medio Rural insta a la empresa a que vuelva a solicitarla en próximas con vocatorias. La sociedad, que ya cuenta con licencia municipal de obra y terrenos en el polígono industrial, amenaza ahora con trasladar el proyecto a Montalegre (Portugal) y el alcalde, Isaac Vila, realiza gestiones ante la Xunta para que lo reconsidere.
La construcción de una fábrica de tortillas en Xinzo, que prevé 60 empleos, corre el riesgo de esfumarse. La sociedad Limiana de Patacas (Lipasa) acaba de recibir una comunicación de la Xunta que deniega una subvención, cuyo expediente había quedado pendiente de resolución del anterior Gobierno gallego, alegando falta de documentación que precisa aportar la empresa. Remite a los promotores a que vuelvan a solicitarla en próximas convocatorias.
La fábrica, con una inversión de siete millones de euros, ya contaba con licencia municipal de obra y terrenos en el polígono industrial de Xinzo, donde estaba previsto iniciar la construcción este mes de septiembre.
Antonio Rodríguez Penín, portavoz de la empresa, considera que es una excusa de la Xunta y muestra su malestar porque no esperaba la negativa. Afirma que es un proyecto que apuesta por la transformación del tubérculo en A Limia para que el valor añadido quede en la comarca y genere riqueza. Además, recuerda que la fábrica genera mucha expectación entre los vecinos por la previsión de empleo y también la recogida a los productores de 22 millones de kilos de patata de calidad Kennebec para elaborar las tortillas. O precio a que pagaríamos a pataca é de 20 céntimos o kilo frente ós aproximadamente 13 que perciben na actualidade, expone Rodríguez Penín.
Califica de incomprensible que se poña este atranco cando é unha aposta clara pola comarca e o sector da pataca había sido considerado como sector prioritario polo anterior bipartito. Y afirma que la sociedad baraja la posibilidad de trasladar el proyecto a Montalegre (Por tugal), situada a 28 kilómetros de Xinzo. No país veciño dan máis facilidades, añade.
La empresa está a punto de iniciar la producción de tortillas en una fábrica de Burgos mientras no se lleva a cabo la construcción de la fábrica en A Limia.
Vila se siente decepcionado por la decisión de Santiago
El alcalde de Xinzo, el popular Isaac Vila, no esperaba la negativa de la Xunta y reconoce sentirse molesto e decepcionado. Afirma que el Concello va a luchar por la permanencia de la fábrica en en la localidad. Vou facer xestións ante a Consellería de Medio Rural para que reciba os promotores e recapacite. Non o esperábamos. Esgrime que estamos nun momento de crise no que o precio que se paga da pataca é ridículo, pero esta empresa daría un precio máis elevado ós productores, ademáis de xerar un importante número de empregos. Vila valora que el crecimiento económico se produce con la creación de nuevas empresas y que hay muchas expectativas puestas en la fábrica de tortillas. En este sentido, también cita que la empresa promotora ya contaba con todos los trámites para empezar las obras. Tiven unha reunión cun representante da sociedade Lipasa na que me comunicou a situación e xa estou facendo as xestións oportunas para que a empresa poda quedar en Xinzo, de feito xa estiven en contacto con Medio Rural. El regidor confía en que se pueda alcanzar una acuerdo para que la fábrica de tortillas sea una realidad.
La fábrica, con una inversión de siete millones de euros, ya contaba con licencia municipal de obra y terrenos en el polígono industrial de Xinzo, donde estaba previsto iniciar la construcción este mes de septiembre.
Antonio Rodríguez Penín, portavoz de la empresa, considera que es una excusa de la Xunta y muestra su malestar porque no esperaba la negativa. Afirma que es un proyecto que apuesta por la transformación del tubérculo en A Limia para que el valor añadido quede en la comarca y genere riqueza. Además, recuerda que la fábrica genera mucha expectación entre los vecinos por la previsión de empleo y también la recogida a los productores de 22 millones de kilos de patata de calidad Kennebec para elaborar las tortillas. O precio a que pagaríamos a pataca é de 20 céntimos o kilo frente ós aproximadamente 13 que perciben na actualidade, expone Rodríguez Penín.
Califica de incomprensible que se poña este atranco cando é unha aposta clara pola comarca e o sector da pataca había sido considerado como sector prioritario polo anterior bipartito. Y afirma que la sociedad baraja la posibilidad de trasladar el proyecto a Montalegre (Por tugal), situada a 28 kilómetros de Xinzo. No país veciño dan máis facilidades, añade.
La empresa está a punto de iniciar la producción de tortillas en una fábrica de Burgos mientras no se lleva a cabo la construcción de la fábrica en A Limia.
Vila se siente decepcionado por la decisión de Santiago
El alcalde de Xinzo, el popular Isaac Vila, no esperaba la negativa de la Xunta y reconoce sentirse molesto e decepcionado. Afirma que el Concello va a luchar por la permanencia de la fábrica en en la localidad. Vou facer xestións ante a Consellería de Medio Rural para que reciba os promotores e recapacite. Non o esperábamos. Esgrime que estamos nun momento de crise no que o precio que se paga da pataca é ridículo, pero esta empresa daría un precio máis elevado ós productores, ademáis de xerar un importante número de empregos. Vila valora que el crecimiento económico se produce con la creación de nuevas empresas y que hay muchas expectativas puestas en la fábrica de tortillas. En este sentido, también cita que la empresa promotora ya contaba con todos los trámites para empezar las obras. Tiven unha reunión cun representante da sociedade Lipasa na que me comunicou a situación e xa estou facendo as xestións oportunas para que a empresa poda quedar en Xinzo, de feito xa estiven en contacto con Medio Rural. El regidor confía en que se pueda alcanzar una acuerdo para que la fábrica de tortillas sea una realidad.
