El independiente Antonio Puga presidirá, cuatro años más, el Concello de Celanova. Cuarenta días después de las elecciones, y después de su particular “vía crucis” -como él mismo definió la sucesión de recursos administrativos y judiciales para tratar de enmendar un error administrativo en la transcripción de los datos en la noche electoral y que ha restado 108 votos y un concejal a Celanova Decide (CD)- la Corporación municipal del Concello de Celanova se constituyó oficialmente en una concurrida y rápida sesión que no se extendió más allá de 30 minutos. “É un día de alegría, cun reto apaixonante como o foi fai catro anos e cunha gran responsabilidade de cara aos veciños e veciñas de Celanova”, dijo en un discurso donde le pudo la emoción al referirse a su famila, haciendo extensible su agradecimiento a sus amistades, compañeros de CD y demás miembros de la Corporación (saliente y entrante), y en especial a los que ayer, con su voto, hicieron posible su investidura. “Foi un xesto de honestidade e coherencia política”, les dijo.
El apoyo del PSOE (2 ediles) y del BNG (1) permitió que Puga revalide la alcaldía con los cuatro concejales electos que le otorgó el acta de proclamación, pero brindó su mano a todos los miembros de la Corporación para lograr “o mellor para Celanova”. El Partido Popular, que fue la lista más votada el pasado 28M, tuvo cinco votos para su candidato Pablo Pérez. El de los cinco concejales electos que acudieron a la sesión. “Eu decidín que no viñese”, dijo Pérez en referencia a la ausencia de la número seis de la lista, Ana Fernández Antorrena, manteniendo lo que dijo siempre, que el resultado real es de 5-5-2-1. “Agora haberá que esperar ao que decida o Tribunal Constitucional”, dijo Pérez.
Cuatro años "cañeros"
La reedición del pacto con el PSOE otorgará “máis responsabilidades” a su candidata Teresa Barge, quien asumirá la tenencia de alcaldía y tendrá representación en la junta de gobierno. “Foi algo moi meditado”, dijo Barge sobre el apoyo y mostrando su ilusión por las nuevas responsabilidades, “duplicaranse”, dijo resaltando también el papel de su compañero -y número 2- Jesús Regal. “Teremos áreas moi potentes”, dijo. Tras dar su enhorabuena a Pablo Pérez, por su candidatura valiente, y al propio Puga, Barge apuntó que “serán catro anos diferentes, catro anos dunha muller moi cañeira”, dijo.
Sobre el acuerdo alcanzado, que no se hizo público hasta el mismo momento de la votación, Puga dijo que “son moitas máis as cousas que, ao longo destes anos e nos que quedan por vir, nos uniron, nos vincularon, que aquelas pequenas cousas que nas que poidamos ter algún tipo de discrepancia que, en todo caso, sempre é enriquecedor”. Y tendió la mano al representante del BNG “para, si quere, ser parte das solucións, ser parte do goberno e tamén da toma de decisións”.
Caciquismo
Algo que, por el momento, no contempla el nacionalista Leopoldo Rodríguez, cuya postura fue la de “apoiar a investidura e non entrar no goberno. O pobo de Celanova non nos colocou máis que na oposición e esa é a expectativa que temos”. Rodríguez, muy crítico en estos cuatro años con el gobierno en coalición, argumentó su voto a favor por “cuestión ideolóxica. O noso partido non vai permitir o acceso ao PP aos concellos”, para acto seguido enfatizar que, a nivel particular, “este grupo -por CD- cometeu bastantes erros”, pero dijo que “coñecemos ao candidato do PP e creemos que non é unha boa solución para Celanova. Como grupo político estamos en contra do caciquismo máis rancio que representa a familia Cortés. Polo tanto non podiamos permitir que Celanova se converterse nunha nova Mancomunidade”, declaró el nacionalista tras tildar a dicha institución de “un cortijo particular onde impera o caciquismo, o nepotismo”.
