La cita gastronómica de la villa congregó a vecinos y visitantes en el Claustro Barroco
Nada menos que 380 raciones, según los organizadores, se repartieron en la jornada de ayer en el refectorio del Claustro de San Rosendo, en Celanova, con motivo de la celebración de su primer día de la Festa da Faba. Lo cierto es que el tiempo invitaba a degustar platos contundentes y en Cerlanova acertaron de lleno con el día y el menú. Entre los asistentes, “más gente de fuera de Galicia, catalanes, vascos, madrileños e incluso alguno de Extremadura”, señala Julio Gosende, impulsor de este evento que compartía espacio en la jornada de ayer -y repetirá en la de hoy- con la Feria de Artesanía y Antigüedades y el Mercado de Segunda Mano.
Una oferta lúdica variada que remataba con actuaciones musicales y el consiguiente baile.
En este Domingo de Pascua, la villa celanovense vuelve a invitar a degustar sus fabas, junto con empanada de carne de ternera cachena, vino, bica y chupitos, por un módico precio de nueve euros.
La jornada se redondea con una nueva edición de la Xuntanza Motera, “que ya tiene 120 motos apuntadas”, según subraya Julio Gosende. “Reunir a tanta gente con este tiempo no es cosa fácil, así que la valoración de esta Semana Santa no puede ser más que positiva”, añade Gosende.
