La prolongación de la Instrucción permite, dice el fiscal, asegurar una correcta averiguación de los hechos
El fiscal ha pedido a la jueza de Celanova que la instrucción de la causa por el asesinato de Adolfo Enríquez, párroco de Vilanova, en marzo de 2015 sea declarada compleja, es decir, alargar la instrucción hasta un plazo máximo de 18 meses. Todo ello con vistas a que el día en que haya pruebas o indicios sólidos para acusar a los dos investigados la instrucción no se vea aquilatada por los plazos ordinarios (seis meses).
La acusación pública recuerda que aún está pendiente la práctica y recepción de periciales en EE.UU. (se ofició a Google y a WhatsApp para facilitar los correos electrónicos y mensajes de los imputados). Además, añade, que la instrucción ya acumula nueve tomos, lo que supone algo más de 4.000 folios, hecho que "requerirá un estudio detallado y pormenorizado imposible de asumir en el plazo de seis meses".
La complejidad de la causa permite. según argumenta el fiscal en su petición, "asegurar la correcta averiguación y esclarecimiento de los hechos investigados, un robo con violencia y un asesinato".
Los dos imputados en la causa, que nunca ingresaron en prisión por falta de pruebas sólidas con la que justificar una medida restrictiva de la libertad, Elvir Fehratovic, 37 años, y su sobrino Arsen (30) fueron detenidos a mediados de enero de este año. La Guardia Civil sospechó de ellos porque no sólo conocían y frecuentaban a la víctima, a la que pedían limosna con frecuencia, sino que el coche de uno de ellos fue visto en Vilanova dos Infantes el día de su muerte.
Ambos investigados fueron interrogados en varias ocasiones como testigos por parte de loas fuerzas de seguridad pero , tras ser detenido, no volvieron a declarar. Niegan los hechos e incluso aseguran que apreciaban a Adolfo Enríquez.
