Dormir bien y mucho, un café con leche después de comer y no tomar ninguna pastilla parecen ser los secretos de la longevidad de Josefa Álvarez Rodríguez, vecina de Cartelle, que ayer festejó su 107 cumpleaños en compañía de familiares y amigos en la residencia de O Mundil, en Outomuro. 'Xa teño cen anos, máis sete', respondía la centenaria sorprendida por la repercusión de su aniversario. 'A que veñen istes paparazzis?', preguntaba a sus seres queridos.
A pesar de los achaques propios de la edad, y que en ocasiones le impiden recordar épocas pasadas, Josefa ejerció de perfecta anfitriona. Tras soplar las velas y compartir la tarta, animó la celebración entonando los versos de canciones populares gallegas. 'Na beira, na beira, na beira do mar...', cantaba la centenaria, mientras el resto les seguía dando palmas.
A su lado, su sobrino José Álvarez la observaba emocionado. 'Ela me levou a bautizar', comenta con cariño mientras recuerda las tardes que venía a pasar a O Viso desde su casa en Vigo. 'Ela fixo de nai cando perdín a miña con tan solo sete anos', comentaba.
Soltera, sin hijos y con unos hermanos en la emigración, Josefa fue capaz de sacar adelante a sus progenitores con una dura vida dedicada al campo. Aunque de esos temas prefiere no hablar. 'Imos bailar?', pregunta queriendo cambiar de tema. Una de las cuidadoras le toma la palabra y la saca a la pista ante el regocijo de la homenajeada.
LUCHADORA Y VITAL
Natural de San Tomé do Viso ( Ramirás), desde hace más de una década vive en la Residencia de O Mundil. 'Cando chegou á residencia, xa fará uns 14 anos, ela era unha traballadora máis. Colaboraba co persoal e non lle gustaba estar quieta', recuerda el teniente de alcalde, Jaime Sousa.
Su vitalidad, alegría y ganas de vivir son dos de las cualidades que más destacan los que la conocen. 'Siempre está dispuesta a participar en las actividades, come sola y camina muy bien', relata la directora del centro, Vicenta Freire. Cualidades a las que habría que añadir el carácter luchador y trabajador que durante su larga vida le permitió salir adelante en la Galicia rural. 'Nunca viaxou e traballou sempre no campo. As pasou negras', relata Antonio Bugallo, un familiar que confesaba como 'ela, que era solteira, tiña que ir a gañar o xornal e, nalgun momento, chegounos a decir que daquelas as galiñas comían mellor que ela'.
A pesar de su longevidad y su título de 'avoa de Cartelle', Josefa Álvarez, todavía no es la matriarca de Galicia. Ese título lo ostenta, según el equipo de investigación gerontológico estatal (http://segundacentena.blogspot.com.es), Francisca Barracel Fernández. Esta alaricana residente en la ciudad de As Burgas cumplió 110 años el 18 de junio del año pasado.
A su lado, su sobrino José Álvarez la observaba emocionado. 'Ela me levou a bautizar', comenta con cariño mientras recuerda las tardes que venía a pasar a O Viso desde su casa en Vigo. 'Ela fixo de nai cando perdín a miña con tan solo sete anos', comentaba.
Soltera, sin hijos y con unos hermanos en la emigración, Josefa fue capaz de sacar adelante a sus progenitores con una dura vida dedicada al campo. Aunque de esos temas prefiere no hablar. 'Imos bailar?', pregunta queriendo cambiar de tema. Una de las cuidadoras le toma la palabra y la saca a la pista ante el regocijo de la homenajeada.
LUCHADORA Y VITAL
Natural de San Tomé do Viso ( Ramirás), desde hace más de una década vive en la Residencia de O Mundil. 'Cando chegou á residencia, xa fará uns 14 anos, ela era unha traballadora máis. Colaboraba co persoal e non lle gustaba estar quieta', recuerda el teniente de alcalde, Jaime Sousa.
Su vitalidad, alegría y ganas de vivir son dos de las cualidades que más destacan los que la conocen. 'Siempre está dispuesta a participar en las actividades, come sola y camina muy bien', relata la directora del centro, Vicenta Freire. Cualidades a las que habría que añadir el carácter luchador y trabajador que durante su larga vida le permitió salir adelante en la Galicia rural. 'Nunca viaxou e traballou sempre no campo. As pasou negras', relata Antonio Bugallo, un familiar que confesaba como 'ela, que era solteira, tiña que ir a gañar o xornal e, nalgun momento, chegounos a decir que daquelas as galiñas comían mellor que ela'.
A pesar de su longevidad y su título de 'avoa de Cartelle', Josefa Álvarez, todavía no es la matriarca de Galicia. Ese título lo ostenta, según el equipo de investigación gerontológico estatal (http://segundacentena.blogspot.com.es), Francisca Barracel Fernández. Esta alaricana residente en la ciudad de As Burgas cumplió 110 años el 18 de junio del año pasado.
