La elección de Isabel Coixet para llevar al cine la Praza Maior de Celanova en “Elisa y Marcela” o el éxito que supuso el rodaje de la serie de Netflix “El desorden que dejas” en la villa, son la punta del iceberg del amplio bagaje audiovisual que atesora la villa de San Rosendo como plató de ficción. Precisamente ese es el nombre del taller que, desde hace 12 años se desarrolla en el marco del Curso sobre Medios Audiovisuais de Celanova (CeMAC) que, si no hubiera sido por el parón del año pasado, este verano hubiera alcanzado su mayoría de edad. “O ano pasado non houbo curso e este ano, pola pandemia, decidiuse organizar en Ourense no marco do OUFF, pero non foi o mesmo”, reconocía Paulino Perez, director del taller del CeMAC.
La villa de San Rosendo lleva 18 veranos siendo un referente del sector audiovisual con la celebración del Curso de Medios Audiovisuais
Celanova, continuaba Pérez, “é un pobo que se presta as rodaxes, ten moitos pratos, é agradable e cómodo… Aiquí tes a Praza Maior como centro neurálxico e ao acabar o curso imos todos a tomar algo. Iso ten valor. Fai dous anos que non viña e o outro día, cando vin a praza sen coches, quedei gratamente sorprendido”, confesaba destacando también la importante reforma realizada en el albergue municipal en el que se hospeda estos días un equipo de 12 personas, estudiantes de Comunicación Audiovisual de la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación de Pontevedra.
MELA 
CASAL (Actriz)
“HAI MOITO NIVEL, MOITAS GANAS E MOITAS MULLERES. OXALÁ TEÑAN TRABALLO NA SÚA TERRA”
PAULINO PÉREZ (Director del taller )
“CELANOVA SE PRESTA PARA AS RODAXES E, AGORA ESTÁ DE MODA, PERO NÓS FOMOS OS PROPULSORES”
ANDREA VARELA (Directora del cortometraje)
“EL RODAJE ES INTENSO, PERO SI EL EQUIPO ES BUENO Y HAY COMPAÑERISMO COMO AQUÍ, SE LLEVA BIEN”
Los actores profesionales Iván López y Mela Casal protagonizan el relato escrito y dirigido por universitarios gallegos. “Para min é un reto como calquera outro traballo. Son rapaces novos, moi listos e cun nivel estupendo. Eu estou encantada porque me tratan marabillosamente e por estar en Celanova, pobo ao que lle teño un especial cariño porque aquí naceu Celso Emilio Ferreiro”, apuntaba Casal.
Las habitaciones del Pazo A Fábrica albergaban ayer un ir y venir de cámaras y atrezo. ”Solo con este pazo, el corto ya gana. Es precioso, tiene un jardín inmenso y luego los actores, me lo ponen muy fácil, aprendes de ellos y de todo el equipo en general, son muy buenos profesionales”, describe la directora Andrea Varela, para quien este será su primer gran proyecto, aunque ya ha dirigido otros trabajos antes.
El taller se presenta como un reto antes de salir a la vida laboral “y una muy buena decisión que tuvo Paulino Pérez, porque nos permite ver cómo es un rodaje de verdad, cómo son las dinámicas, trabajar en equipo,...”, reconoce la directora coruñesa quien cree que “el futuro de la profesión es duro, pero pienso que si trabajas y eres constante, llegarás a conseguir lo que te propongas… En Galicia hay muy buen nivel, y cada vez más, así que toca esforzarse”.
En 11 ediciones, “Celanova plató de ficción” ha promovido el rodaje de cuatro cortos, cuatro webseries, un documental, un falso documental y un making off en diferentes escenarios del Monasterio, el casco histórico y los alojamientos turísticos locales. “Se lle quitas estas cousas a estes pobos, estás a matalos aínda máis. Temos que botar unha man aos pobos de interior para que sigan tendo vida porque, aínda que vimos no verán e pocos días, saímos a comer, a xente os coñece e tamén aparecen nos créditos”, decía Pérez. El resultado de este rodaje, que plasma el valor de las relaciones intergeneracionales, se estrenará en diciembre.
