Particulares, empresas y entes publicos pueden presentar desde el lunes sus proyectos

O Vieiro-Leboreiro abre el plazo para ayudas europeas

Un momento de la presentación del grupo, presidido por Armada, Fernández y Boo, en Celanova. (Foto: L.F.)
El Grupo de Desarrollo Rural GDR-16 O Vieiro-Leboreiro marcó el viernes el pistoletazo de salida para aquellas asociaciones, públicas y privadas, empresarios y particulares interesados en acogerse a las ayudas económicas que, a través del programa Leader que gestiona las ayudas europeas, permitirán invertir 3,8 millones de euros en los concellos de A Baixa Limia y Celanova (con excepctión del A Bola, que participa en el GDR-15).
El salón de actos del Monasterio de San Salvador albergó una concurrida presentación donde los representantes políticos dejaron por un momento sus diferencias para anunciar la puesta en marcha definitiva de un grupo que integra 14 ayuntamientos, dos entidades supramunicipales y 104 asociaciones (vecinales, deportivas, juveniles, culturales,...) que 'leva máis dun ano de retraso e que trataremos de reducir o máximo', reconocía su gerente, Xosé Manuel Puga.

Durante su intervención, la secretaria María Jesús Boo destacó que 'la gran diferencia de este Leader es su gran dimensión integradora, hasta el punto que la sociedad civil ha jugado un importante poder de decisión en la creación del grupo'. Con un presupuesto que asciende a 3.863.000 euros para invertir en ambas comarcas hasta 2013, el vicepresidente del grupo y alcalde de Bande, José Antonio Armada, instó a los presentes, 'tanto os particulares coma á administración pública a aproveitar o Plan Leader para presentar proxectos que impliquen o desenvolvemento económico da zona'.

La semana que viene, confirmaba el presidente Xan Carlos Fernández, se abre el plazo para la presentación de los proyectos que, dependiendo del tipo y cuantía, podrán obtener una subvención de hasta el 100%. Iniciativas que van desde la puesta en marcha de un transporte adaptado a personas con discapacidad, mejoras de la cobertura social o las actividades lúdico-deportivas por parte de las entidades públicas (no productivos), así como inversiones productivas para la construcción, adquisición y mejora de locales o la puesta en marcha de nuevos proyectos por parte del tejido empresarial, 'co fin de fixar poboación e contribuir o desenvolvemento económico comarcal', matizó Puga.

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