Los vecinos de Vilanova dos Infantes, en Celanova, se afanan estos días en la retirada de la decoración y las luces navideñas que, durante el último mes, han trasformado el burgo medieval en un poblado de cuento.
La Asociación de Veciños Gutier Menéndez ha capitaneado, por tercer año consecutivo, una ambientación y decoración que ha conquistado a vecinos y visitantes. “La sensanción es muy buena, hubo una afluencia constante de visitantes, sobre todo los fines de semana del 25 y 31, y el tiempo también ha permitido a la gente disfrutar. Calculamos que habrán pasado por aquí unas 5.000 personas”, cifraba Manuel Riestra, encargado de las actividades navideñas de Gutier Menéndez, desde donde agradecían y destacaban la colaboración con el comercio local y su tren navideño y el apoyo del Concello, así como la implicación a título individual de los vecinos que se volcaron con la iluminación de sus viviendas.
Una de las principales novedades de esta edición ha sido el poblado de Papá Noel y la entrega personalizada de los regalos que se realizó en la tarde del 25 de diciembre. “Queremos darle más forma a la propuesta y fomentar esa actividad, así como la mejora de los servicios y también extender las decoraciones temáticas por otros barrios del pueblo”, relataba Riestra, quien ya está planeando los diseños de los decorados para 2022.
El colectivo, que suma casi 200 socios, se constituyó oficialmente en octubre del año 2019 para llevar a cabo iniciativas de dinamización social y cultural en la parroquia. Además de la decoración navideña, la asociación ha liderado este año la reforma del antiguo puesto de Cruz Roja en O Cristal, la mejora y ajardinamiento de espacios públicos e iniciativas contra el feísmo.
