El palista ourensano Gabriel Campo Pavón, haciendo pareja con Rubén Millán, se juega el billete olímpico en la final del K-2 que se disputa en Duisburgo
Hoy es la jornada decisiva. El último billete. Hasta cinco palistas gallegos se juegan el pase a los Juegos de Río de Janeiro en el preolímpico de Duisburgo, que vive su jornada final.
Pero el interés de Ourense se centrará en el K-2 1.000 metros. De ahí puede salir el primer olímpico masculino en la historia del deporte ourensano.
El barco del Kayak Tudense formado por el ourensano Gabriel Campo Pavón y Rubén Millán finalizó ayer en la segunda posición de su serie y tendrá al ganador de la misma, el bote húngaro formado por Tibor Hufgnagel y Bence Dombvari, como principales oponentes.
Medio segundo separaron ayer a ambos. No obstante, la tripulación polaca, que ganó su serie con peor tiempo, pero de forma muy cómoda, también se presenta como candidata a obtener el único billete disponible para Río 2016.
"La regata de hoy -por ayer- nos hace pensar que nos encontramos incluso mejor de lo que pensábamos. La previsión para la final es un poco de viento por el lado de la calle 9 y nosotros salimos en la 6 por lo que creo que nos puede ayudar", dice Pavón.
La tarea no parece sencilla para Pavón y Millán, que deberán mejorar las prestaciones de ayer. La cita será a las 13:30 horas.
"No hay nada que pensar, es la carrera de nuestras vidas y vamos a ir a muerte. Espero que en agosto la carrera sea otra pero para eso antes tenemos que ganar esta", explica Millán.
Los demás españoles
Cristian Toro, del Fluvial de Lugo, y Saúl Craviotto, ganaron su serie de K-2 200 metros con autoridad. Michele Bertolini y Riccardo Cecchini, de Italia, ocuparon la segunda posición. Los componentes del equipo español demostraron encontrarse en buen momento de forma.
Diego Romero fue tercero en su serie de C-1 1.000 metros, lo que le permite disputar la final este jueves. Ese era el objetivo prioritario en la regata. Le superaron Matej Rusnak, de Eslovaquia, y Strahinja Mladezci, de Serbia, enzarzados ambos en una lucha por ser primeros. Debe finalizar entre los dos primeros para tener opciones de ir a Río (9:45).
El cesureño André Oliveira y David Fernández en C-2 1.000 metros. Los dos componentes del Firrete no tuvieron que afrontar ninguna fase previa.Alemanes, rumanos, moldavos y checos son sus grandes adversarios. Hay dos plazas en juego (13:37).
Ourense está hoy pendiente de un piragüista que entrena en Castrelo de Miño y que está a 1.000 metros de Río de Janeiro.
