FÚTBOL SALA FEMENINO

Candela Soria: “Aprender de Iria, Vane o Nespereira es todo un lujo”

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photo_camera Candela Soria López, pívot del Burgas, ayer en la central de Os Remedios.

Una de las perlas del fútbol sala ourensano, solo quiere “seguir aprendiendo y disfrutar de este deporte”

Estudiante de Segundo de Bachillerato en Carmelitas reconoce no ser una chica de sobresaliente, "aunque sí de notable". Su buena trayectoria lectiva es directamente proporcional a su gran presente pero sobre todo a su brillante futuro como deportista y es que las internacionales Iria Saeta y Vane Sotelo tienen sucesora en casa: Candela Soria López es a sus 17 años una de las perlas del fútbol sala ourensano.

La pívot del Cidade de As Burgas fue una de las protagonistas en el derbi de Primera división del sábado. Anotó el segundo gol de su equipo, el que a la postre daría el triunfo ante el Envialia.

"Fue mi primer gol en un derbi, un momento muy especial. Vinieron a abrazarme las compañeras y vi a toda la grada levantada celebrando el gol y coreando mi nombre. No me lo podía creer, fue un momento muy bonito", afirma la jugadora ourensana.

A pesar de su juventud Candela afronta la quinta temporada en el Cidade de As Burgas: "Empecé jugando en el colegio en un equipo mixto en el que era la única niña. Me lo pasaba muy bien pero el equipo desapareció y decidí probar en el Burgas", continúa.

Y tras un par de temporadas llega a la élite nacional, con apenas 15 años: "Estuve dos años en el equipo infantil y salté ya al equipo de Primera división, en el que llevo tres años. Nunca me imaginé poder jugar en Primera, sobre todo siendo tan joven, pero vas aprendiendo y mejorando... ¿La temporada pasada? Fue inolvidable. Lograr el subcampeonato de liga fue algo histórico para el club y yo fui una afortunada por poder participar. Le estoy muy agradecida a Manolo (Codeso, el entrenador) por confiar en mí y ofrecerme la oportunidad de formar parte de este proyecto".

Espejos en los que mirarse

Candela es consciente de que en su equipo hay muchos y buenos espejos en los que mirarse. Aprender de Iria, Vane o Nespereira es todo un lujo. Trabajar a diario junto a cuatro internacionales es una gran oportunidad y una ayuda para las que nos estamos formando. De ellas se aprende un montón porque además les gusta transmitir lo que saben. Hoy en día soy una mejor jugadora que cuando llegué y las internacionales también tienen su culpa".

Candela no se hace planes de futuro, ni en lo deportivo ni en lo curricular, pero tiene claro que "en los estudios hay que cumplir. Curso bachiller por la rama de ciencias sociales y todavía no he decidido qué haré. En este momento estoy muy cómoda aquí, seguir aprendiendo de mis compañeras, pero tampoco en la carrera. Lo que sí tengo claro es que llegue hasta donde llegue el deporte seguirá formando parte de mi vida".

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