Envialia y Burgas empiezan el tramo del curso en el que definirán los objetivos por los que van a luchar esta temporada en la Primera de fútbol sala
La Primera división, que ya atravesó el ecuador de la competición, abre el sábado la segunda mitad del curso después del parón por la disputa de la primera fase del Campeonato de España de selecciones autonómicas en el que la Galicia de Antía Pérez, Nerea González y Clara Fernández logró de forma brillante la clasificación para las semifinales al superar a la Comunidad Valenciana y Navarra.
Después de una primera vuelta liguera muy irregular, los equipos ourensanos están en el momento de definir los objetivos por los que van a luchar hasta el final de temporada.
Por sensaciones, el curso marcha un poco mejor que hace un mes, cuando se terminó el parón navideño, pero queda mucho trabajo por hacer.
El Envialia, que justo antes de las fiestas había perdido la ocasión de acercarse a la zona noble con la inoportuna derrota ante el Burela en Os Remedios, parece que está retomando el pulso a la categoría. Las dos victorias con las que cerró el primer acto y los enfrentamientos directos entre los perseguidores del líder, le han permitido primero afianzarse en los puestos de Copa de España, ya que recuperó la sexta plaza, y después permitirse el lujo de ver de lejos la segunda plaza porque el Atlético, aunque sin el avasalle de otros tiempos, es por el momento inalcanzable. Y es que aunque todavía está a nueve puntos, el equipo de Chipi sueña con luchar por ser el mejor de los equipos terrenales.
El Burgas, por su parte, ha revivido con la victoria ante el Cádiz FSF en el primer match ball en contra. No estaba siendo justa la competición con el equipo de Manolo Codeso, que se había merecido estrenar su casillero de triunfos mucho antes que en la decinoquinta jornada. Antes del miniparón por las selecciones, las blanquiverdes tenían tres partidos para soñar con la permanencia. Todavía son seis los puntos que le separan del cuarto por la cola pero el Burgas se ganó el billete para luchar por seguir en la liga de las mejores.
El duelo ante las gaditanas salió cara después de que el equipo sacara lo mejor de sí y remontara, pero culminar la primera vuelta con solo 5 puntos le obliga a no desandar lo que tanto trabajo le costó y por ello no está permitido fallar en las dos próximas jornadas. Y todo pasa por el doble duelo ante equipos madrileños: el sábado, repitiendo como local, recibe al Móstoles, quinto por la cola con 10 puntos más que las ourensanas. Siete días después, otro match ball, esta vez a domicilio y con el Soto del Real como oponente.
Llegar vivas al tramo final
La empresa no será sencilla para el conjunto de Manolo Codeso pero el técnico tiene claro cuál es la primera meta: "Tenemos que llegar al último mes y medio de competición con opciones, si somos capaces de superar esta situación tan complicada, que estoy seguro que así será, tendremos muchas opciones porque confío plenamente en este grupo de jugadoras".
