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Nadie puede con el Campus como local

photo_camera Jaime, del Campus, pugna por un balón aéreo con un rival del Durango.

El conjunto ourensano se impuso con claridad al Durango en un gran partido colectivo

El Campus Ourense prosigue con su marcha triunfal como local y sumó una nueva victoria, esta vez ante el Durango, en un partido en el que los ourensanos dominaron desde la patada inicial.

El frío de la mañana dominical no amedrentó a los ourensanos, que pronto marcaron el ritmo del juego. 

Tras un par de tímidas internadas del conjunto visitante, el Campus abrió la brecha en el minuto cinco. En la primera llegada con peligro a la línea de 22 vasca, Justin superó a la defensa para ensayar entre palos (transformó con facilidad Moi).

La reacción del Durango llegó justo a continuación con un golpe de castigo que anotó Iturriaga (7-3).

A partir de ese momento, el Campus dio un paso adelante y no tuvo excesivos problemas en ampliar su renta en varias ocasiones.

A los 15 minutos, un avant de Durango propició una melé de la que Kottier salió con habilidad, avanzando varios decenas de metros para terminar pasándole el balón a MacLeod, que firmó un ensayo de pura velocidad  (12-3).

Justo a continuación, el desajuste defensivo del Durango y el buen juego a la mano del Campus permitió que Comesaña firmase un nuevo pase por la línea de ensayo.

Y nuevamente, ante un rival de los ourensanos desquiciado, robo de balón de Moi, que galopó para firmar otro ensayo y dejar el encuentro muy de cara para los de David Monreal (24-3).

Justin se sumó nuevamente a la fiesta del Campus, congelado por los cuatro grados de temperatura que se respiraban en el Estadio Universitario, para hacer subir al marcador un nuevo ensayo, en esta ocasión tras una melé favorable a los locales.

El Durango se despertó antes del descanso con un ensayo obra de Zubia, aprovechando un desajuste defensivo ourensano y la baja de Matt Kottier que tuvo que retirarse del campo con una conmoción (31-10).

Más de lo mismo

Tras el paso por los vestuarios, el partido continuó en manos del Campus. A pesar del ensayo rápido del Durango, el equipo ourensano supo reponerse, cruzando la línea de try en dos ocasiones más (Juan Rodríguez y Guille) para marcar un clarificador 45-15.

Cuando el juego bajó de nivel, producto del cansancio y el marcador, el Durango anotó el último ensayo del encuentro, obra de Mikel Blanco a la salida de una touch.

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