Un gol del delantero brasileño Renan le fue suficiente al equipo de Fran Justo para quedarse con los tres puntos ante el líder de Tercera, el Bergantiños
El Ourense CF suma y sigue. Todo porque logró derrotar al Bergantiños por un gol a cero y acabó con la imbatibilidad del todopoderoso líder coruñés. Y es que cuando el fútbol está de cara, todo es maravilloso.
El Bergantiños mete miedo cuando observas el once que pone en juego. Jugadores con muchas horas de vuelo en Segunda B, que le dan un empaque temible.
Pero si no te amilanas, le plantas cara y por supuesto, no negocias con el esfuerzo, les puedes competir el partido. El Ourense CF lo hizo. Tenía muy claro como jugarles y por eso se llevó los tres puntos.
Los coruñeses asustan, pero no pasaron de ahí. Después en el área le faltó mordiente y mala leche. Cierto es que tienen mucha calidad, que la tocan muy bien, eso sí hasta las proximidades del área, y que seguramente, si se ponen delante en el marcador y llevan el partido a su terreno, pero ayer no fue así y pusieron el punto y final a una racha de encuentros sin perder que llevaban acumulando desde la primera vuelta de la temporada pasada.
Por su parte, el Ourense CF, que vive en una nube con el comienzo de esta temporada en la que todavía no conoce la derrota, no quiere despegar los pies del suelo y se apuntan al 'manido' discurso puesto de moda por el 'Cholo' Simeone. Ese que reza que debes de ir partido a partido. Sí, pero que le quiten lo 'bailao'.
El Bergantiños salió en plan líder. Dominando el partido y aproximándose a la portería de Michi, que desbarató bien un tiro de Pablo Antas mandándolo a saque de esquina y también un remate de Jorge Sáez.
La primera llegada ourensanista fue pasado el cuarto de hora. Renán finalizó una jugada de ataque con un disparo cruzado. Volvió a la carga el equipo visitante, que gozó de una buena ocasión del delantero Rubén Rivera que despejó un defensa local.
El Ourense avisó por segunda y última vez. Como no, por medio de Renan en el minuto 34. Esta vez el meta Cristopher tuvo que exigirse para mandar a corner.
Y a la tercera fue la vencida, minuto 40. El mencionado Renan recogió una pelota en el segundo palo y tras hacerse sitio con el cuerpo, superó al meta del Bergantiños con un potente disparo. 1-0 y partido encarrilado.
En la segunda parte, mismo guión, pero acentuado. El Bergantiños metió más artillería, con Nacho y Granada y el Ourense cedió terreno. Quizá en exceso.
Pero ni por esas. Dominio estéril visitante y todavía menos ocasiones que en la primera parte.
Fran Justo no paraba de dar órdenes a sus jugadores, tantas que no le llegaba la hora de escuchar los tres pitidos del final del encuentro. Al final llegaron entre la alegría ourensanista que sigue soñando.
