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El último reto americano de Navarro

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photo_camera Rebeca, con uno de los artículos del Diario La Región publicados en la web.

La jugadora ourensana, formada en la base del Carmelitas, afronta desde el domingo los playoff de la liga universitaria, tras ser campeona en la fase regular

Con apenas 21 años, Rebeca Navarro se ha pasado media vida lejos de su ciudad natal. El baloncesto, los estudios de psicología que terminará este año y la profesión de su padre, el entrenador de baloncesto Ángel Navarro, le han llevado desde la base del Carmelitas hasta Pittsburgh, (pasando por Vigo, Zaragoza, Salamanca y Gran Canaria) donde afronta sus últimos encuentros con las Colonials de la Universidad de Robert Morris, campeonas de la fase regular en la Northeast Conference (NEC) de la NCAA, la liga universitaria norteamericana.

Último año como universitaria y título de liga regular en la NEC, con un paso adelante en cuanto a números. ¿Cuál es la clave del éxito de las Colonials este curso?

Este año se graduaron cuatro compañeras y tuvimos que asumir el liderato del equipo otras jugadoras. Dimos un paso adelante y trabajamos duro para sumar un buen resultado en la fase regular con Charlie Buscaglia, nuestro entrenador.

El inicio de 2017 marcó un antes y un después en el equipo, con una racha de 11 victorias y una sola derrota para un total de 29-10 ¿Qué cambió en el equipo a mitad de competición? 

La verdad es que empezamos la temporada muy flojas. Ganábamos un partido... perdíamos otro... siempre irregulares. A mitad de temporada hablamos y todas estuvimos de acuerdo en que éramos mejores de lo que decían los resultados. Remamos todas y llegaron los resultados.

Como campeonas, disputaréis todas las eliminatorias como anfitrionas, ¿os convierte en rebeca_empezando_resultfavoritas?

Está claro que jugar en casa siempre es importante pero es difícil hablar de favoritas. No me gusta verme como las rivales a batir. Hay confianza para sacarlo adelante pero hay que jugar los partidos.

Y después, en la fase final de la NCAA, ¿el objetivo es pasar la primera ronda?

Primero hay que ganar estos partidos y después podremos hablar de otros retos (se ríe). Es cierto que nos eliminaron las dos favoritas las dos veces anteriores, pero hay que ser optimista sobre los resultados.

Han pasado cuatro años desde que dejaste Gran Canaria en Liga Femenina, para iniciar tu etapa en la NCAA ¿Qué ha cambiado en Rebeca Navarro en este tiempo? 

Menos el aspecto físico, yo creo que absolutamente todo. Creo que soy una jugadora más completa que en Canarias. Ya no dependo tanto de mi tiro y ahora ayudo más en labores defensivas. A nivel personal, esta experiencia me ha hecho madurar y me obligó a buscarme la vida.

¿Jugar en la NCAA era tu primera opción al terminar aquella temporada? 

¡No! Realmente me arrastró hacia esta opción mi padre (vuelve a reírse). Yo no lo tenía tan claro cuando comenzó a gestionar el papeleo pero una vez estuve aquí supe que era la decisión correcta. Él me convenció de que si quería estudiar y jugar, ésta era la opción adecuada y tenía razón.

La distancia y estar lejos de la familia es siempre complicado. ¿Pensaste alguna vez en dejarlo y volver a casa? 

Muchísimas veces, especialmente al principio. Nunca te acostumbras a vivir lejos de casa, es una de las cosas que aprendes cuando estás a tanta distancia de tú familia.

Trebeca_campeonas_espana_junior_canarias_resultodo el mundo habla de las facilidades a la hora de compaginar los estudios con el deporte. ¿Cómo es el día a día? 

Aquí hay una estructura en torno al deporte. Las clases giran alrededor del baloncesto y podemos compaginar la competición con las clases y los exámenes, está todo más dirigido a compatibilizar todo.

A pesar de llevar desde los 12 años lejos de casa, ¿sigue la morriña? 

Eso siempre (suspira), además de la familia, echo de menos la comida, ya sea en casa o en los restaurantes. Al principio lo pasaba peor con el idioma, desconectaba en clases y no me enteraba de nada pero ahora, al acostumbrarme al idioma, lo que peor llevo es eso, no poder comer como en España. 

Y en el otro sentido, cuando toda esta experiencia termine en mayo, ¿qué echarás de menos de Estados Unidos?

Los desayunos norteamericanos, son espectaculares. Ahora en serio, a mis compañeras de equipo, hemos formado una familia y será difícil separarnos.

¿Por dónde pasa el futuro de Rebeca Navarro tras la NCAA? 

Lo único claro es que vuelvo a Europa. Esta etapa ha sido bonita pero toca a su fin, me apetece estar un poco más cerca de casa y la familia.

¿Cerca o lejos de casa? 

La verdad es que no hay nada decidido todavía. Al terminar la temporada después de la graduación nos sentaremos y miraremos la mejor opción que podamos.

La última, ¿retorno con el tercer anillo de conferencia? 

Ojalá, pero será difícil. Lo divertido empieza el domingo 5. Sería una bonita forma de cerrar mi paso por la universidad.

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