El Barcelona se impuso sin ningún tipo de problema (75-86) en la cancha de un Gipuzkoa Basket que sólo ofreció resistencia en el primer cuarto, para ser arrollado después por un equipo catalán que se exhibió en San Sebastián a pesar del gran encuentro del local Jason Robinson, 36 puntos.
Un 15-14 fue la última vez en la que los donostiarras estuvieron por delante. Entonces, Xavi Pascual movió el impresionante banquillo con el que cuenta y los guipuzcoanos comenzaron a sufrir porque tanto el rebote ofensivo como defensivo eran para un conjunto azulgrana que además se lucía en el tiro exterior y en su agobiante presión integral.
El 27-50 a falta de dos minutos para el descanso era harto elocuente y constataba que no iba a ser un partido igualado como otras temporadas.
Con todo decidido, los catalanes retiraron el pie del acelerador y los locales pudieron 'maquillar' el marcador, acercándose incluso a los nueve puntos (73-82) en el último cuarto.
