El ciclista alemán Heinrich Haussler (Cervelo) se impuso en la segunda etapa de la París-Niza, disputada entre las localidades de Saint-Brisson-sur-Loire y La Chapelle-Saint-Ursin sobre 195 kilómetros y que tuvo un final ajetreado por una caída en el seno del pelotón en la que se vio involucrado el español Alberto Contador (Astana).
De todos modos, el corredor madrileño salió ileso y sin nada grave que lamentar de este percance, recibiendo rápidamente la ayuda de su equipo que le acompañó hasta la línea de meta.
El de Pinto entró con retraso respecto al ganador de la jornada, pero al ser en los últimos tres kilómetros no perdió tiempo, por lo que se lo tomó con tranquilidad y mantuvo un día más el maillot de líder.
Esta caída alteró la llegada masiva, que había sido preparada con mimo por las formaciones con velocistas en sus filas. Así, Columbia-High Road, Katusha o Cervelo fueron los más interesados en situar a sus corredores para disputar la victoria.
También estos equipos fueron los que dirigieron la caza para acabar con la fuga del día, entre cuyos protagonistas estuvo el español Aitor Hernández (Euskaltel-Euskadi), y que alcanzó una renta máxima de siete minutos, insuficiente ante la pujanza del pelotón principal, que puso fin a la aventura a falta de 20 kilómetros para el final.
Posteriormente, la caída redujo el grupo, pero los velocistas, entre los que no están Tom Boonen, Mark Cavendish o Thor Hushovd, quedaron bien situados. A falta de algo más de 200 metros, Haussler arrancó con una fortaleza impresionante y no obtuvo respuesta por parte de sus rivales, ganando con facilidad por delante del australiano Mark Renshaw (Columbia-High Road) y del italiano Mirco Lorenzetto (Lampre).
Mañana, se disputará la tercera etapa de esta París-Niza que llevará a los ciclistas desde Orval hasta Vichy sobre 178 kilómetros y sin dificultades reseñables.
El de Pinto entró con retraso respecto al ganador de la jornada, pero al ser en los últimos tres kilómetros no perdió tiempo, por lo que se lo tomó con tranquilidad y mantuvo un día más el maillot de líder.
Esta caída alteró la llegada masiva, que había sido preparada con mimo por las formaciones con velocistas en sus filas. Así, Columbia-High Road, Katusha o Cervelo fueron los más interesados en situar a sus corredores para disputar la victoria.
También estos equipos fueron los que dirigieron la caza para acabar con la fuga del día, entre cuyos protagonistas estuvo el español Aitor Hernández (Euskaltel-Euskadi), y que alcanzó una renta máxima de siete minutos, insuficiente ante la pujanza del pelotón principal, que puso fin a la aventura a falta de 20 kilómetros para el final.
Posteriormente, la caída redujo el grupo, pero los velocistas, entre los que no están Tom Boonen, Mark Cavendish o Thor Hushovd, quedaron bien situados. A falta de algo más de 200 metros, Haussler arrancó con una fortaleza impresionante y no obtuvo respuesta por parte de sus rivales, ganando con facilidad por delante del australiano Mark Renshaw (Columbia-High Road) y del italiano Mirco Lorenzetto (Lampre).
Mañana, se disputará la tercera etapa de esta París-Niza que llevará a los ciclistas desde Orval hasta Vichy sobre 178 kilómetros y sin dificultades reseñables.
