El alero del Blancos de Rueda Jason Robinson ha evolucionado positivamente del esguince en el tobillo izquierdo que se produjo en el partido del pasado domingo ante Unicaja, por lo que todo apunta a que podrá jugar el próximo encuentro ante el Joventut.
El exterior morado ha ido afianzando su presencia en los entrenamientos y si no hay involución, será de la partida en este importante compromiso, donde el equipo confía en romper la racha negativa de cuatro derrotas consecutivas, que le han situado cerca de las posiciones de descenso.
El jugador ha estado recibiendo tratamiento fisioterapéutico tras sufrir la lesión, que ha preocupado a los servicios médicos del club al tratarse de una zona que había sido dañada durante la pretemporada y que le impidió disputar el partido de presentación, correspondiente al XVII Torneo Diputación, con el Oporto como rival.
Si Robinson no se resiente del esguince en las dos sesiones de entrenamiento que restan para concluir la semana de trabajo antes del partido ante el Joventut, estará a disposición de Luis Casimiro en esta cita.
El resto de la plantilla se encuentra en óptimas condiciones físicas, según ha confirmado el club.
