El alpinista leridano Juanjo Garra falleció en la cima del Dhaulagiri (Himalaya), a casi 8.000 metros pese a los esfuerzos para rescatarle de la montaña en la que quedó atrapado y en la que ahora, por decisión de la familia, permanecerá su cuerpo.
Según informaron familiares y amigos, Garra murió en el Dhaulagiri, la séptima cumbre más alta del mundo, tras haber sufrido el jueves un accidente que le dejó herido en un tobillo, impidiéndole continuar el descenso de la montaña.
Los diversos intentos para rescatarle resultaron vanos y el organismo de Garra no pudo resistir, tras pasar tres días a casi 8.000 metros de altitud, a la intemperie, sin comida, hidratación o botellas de oxígeno.
La gran altitud a la que el alpinista sufrió la caída, y las malas condiciones meteorológicas, no permitieron el rescate por helicóptero, si bien los intentos realizados durante el fin de semana para llegar hasta él permitieron sacar a otros ocho alpinistas que se encontraban en el monte Dhaulagiri por encima de los 7.200 metros.
Los diversos intentos para rescatarle resultaron vanos y el organismo de Garra no pudo resistir, tras pasar tres días a casi 8.000 metros de altitud, a la intemperie, sin comida, hidratación o botellas de oxígeno.
La gran altitud a la que el alpinista sufrió la caída, y las malas condiciones meteorológicas, no permitieron el rescate por helicóptero, si bien los intentos realizados durante el fin de semana para llegar hasta él permitieron sacar a otros ocho alpinistas que se encontraban en el monte Dhaulagiri por encima de los 7.200 metros.
