El vigente campeón de Roland Garros y número uno del mundo, el español Rafael Nadal, aseguró que el segundo del ránking de la ATP, el serbio Novak Djokovic, es el favorito para ganar el Grand Slam de París ya que el de Belgrado le ha ganado las últimas cuatro finales que han disputado.
'Probablemente este año el favorito es Djokovic', dijo el mallorquín en rueda de prensa después del sorteo, que deparó que se enfrente en primera ronda contra el estadounidense John Isner, 39 del mundo, en su estreno hacia el sexto título en París.
El de Manacor indicó que la serie de 37 partidos invicto que acumula Djokovic le ha aportado mucha confianza, lo que ha hecho que el serbio mejore su juego.
'Cuando tienes confianza todo mejora. Mucho tiene que ver con la confianza', explicó Nadal, que destacó que en lo que va de año sólo ha disputado finales contra Djokovic, lo que significa que el también está logrando buenos resultados.
Preguntado sobre si está al cien por cien físicamente, el mallorquín respondió que espera estarlo y bromeó diciendo que no puede saberlo con certeza porque no tiene un 'medidor de energía', y explicó que los días de asueto en Mallorca después de Roma no han sido porque necesitase reposar la cabeza.
'Mentalmente no tenía ninguna necesidad de descansar', señaló el cinco veces campeón de Roland Garros, que recordó que ha disputado 'todos los partidos posibles desde Indian Wells', lo que supone 'mucha caña física'.
En caso de derrotar a Isner, los siguientes rivales de Nadal serían Pablo Andújar, Davydenko, Verdasco, Soderling y Murray en semifinales, con lo que el balear evitaría un cruce con Federer.
Por el otro lado del cuadro, Djokovic arrancará contra el holandés De Bakker, para seguir con Del Potro, el francés Gasquet, el checo Berdych y el suizo Federer.
'No me siento invencible. Nadie lo es', explicó Djokovic. 'Intento no pensar en la serie, ni en cuando va a terminar', indicó el número dos del mundo, que aseguró que se encuentra bien físicamente y que a pesar de haber jugado más partidos que otros años antes de llegar a París no se siente cansado.
'Lo bueno es que jugamos cada dos días. No es una situación extraña para mí', dijo el serbio, que agregó que sabe lo que tiene que hacer para aguantar los siete partidos al mejor de cinco sets que le separan de la hipotética final.
El de Manacor indicó que la serie de 37 partidos invicto que acumula Djokovic le ha aportado mucha confianza, lo que ha hecho que el serbio mejore su juego.
'Cuando tienes confianza todo mejora. Mucho tiene que ver con la confianza', explicó Nadal, que destacó que en lo que va de año sólo ha disputado finales contra Djokovic, lo que significa que el también está logrando buenos resultados.
Preguntado sobre si está al cien por cien físicamente, el mallorquín respondió que espera estarlo y bromeó diciendo que no puede saberlo con certeza porque no tiene un 'medidor de energía', y explicó que los días de asueto en Mallorca después de Roma no han sido porque necesitase reposar la cabeza.
'Mentalmente no tenía ninguna necesidad de descansar', señaló el cinco veces campeón de Roland Garros, que recordó que ha disputado 'todos los partidos posibles desde Indian Wells', lo que supone 'mucha caña física'.
En caso de derrotar a Isner, los siguientes rivales de Nadal serían Pablo Andújar, Davydenko, Verdasco, Soderling y Murray en semifinales, con lo que el balear evitaría un cruce con Federer.
Por el otro lado del cuadro, Djokovic arrancará contra el holandés De Bakker, para seguir con Del Potro, el francés Gasquet, el checo Berdych y el suizo Federer.
'No me siento invencible. Nadie lo es', explicó Djokovic. 'Intento no pensar en la serie, ni en cuando va a terminar', indicó el número dos del mundo, que aseguró que se encuentra bien físicamente y que a pesar de haber jugado más partidos que otros años antes de llegar a París no se siente cansado.
'Lo bueno es que jugamos cada dos días. No es una situación extraña para mí', dijo el serbio, que agregó que sabe lo que tiene que hacer para aguantar los siete partidos al mejor de cinco sets que le separan de la hipotética final.
