Menos mal, que alivio o nos están bailando pudieron ser alguna de las frases escuchadas en la grada al finalizar la primera mitad porque el Lugo pasó por encima del filial céltico, que en ningún momento encontró su sitio sobre el campo y que, con el paso de los minutos, vio como los visitantes geneban una multitud de ocasiones.
Al cuarto de hora dieron el primer aviso, pero Sergio, el mejor de los célticos en este periodo, sacó una mano espectacular. Después el colegiado se inventó un penalti en un balón largo que atrapó el portero. Losada lo envió fuera. Fue algo de aire para los de Milo Abelleira porque dos minutos después, el Lugo marcaría en una jugada por banda de Cancela. Puso el centro, la zaga despejó mal, el balón cayó a Marcos que remató en semifallo, pero el esférico le fue hacia Losada, que esta vez no perdonó. El tanto fue un lastre para los célticos que en los siguientes minutos pudieron encajar una goleada. Pero una vez Sergio, y después Losada, con dos fallos en la definición, impidieron que el cuadro lucense sentenciara el encuentro antes del descanso, ante un conjunto local que hasta el intermedio se convirtió en un juguete en manos de los visitantes. No había salida del balón, no había creación y el sistema defensivo era un completo despropósito. Identificó el problema Milo Abelleira y aplicó la cirugía necesaria en el descanso. Pedro García y Cristian dejaron su sitio a Candela y Vázquez. Álex se fue a la mediapunta y el mencionado Vázquez a la banda. El centro del campo, perdido en la primera mitad, se convirtió en un manantial de recuperación y creación. El Lugo no renunció en ningún momento al ataque, pero ahora no encontraba salida, las facilidades se habían terminado. Con más posesión, excelsa la labor de Candela en la medular, los jugadores de ataque de los célticos comenzaron a mostrar su calidad, a sacar el juego que atesoran y llegaron las ocasiones. Vázquez entró una y otra vez por banda y Álex López dispuso de dos oportunidades claras. A la tercera no perdonó. En una jugada iniciada en banda por Mateo, el balón llegó a Oriol, que al primer toque habilitó en profundidad a Álex y éste batió a Escalona de tiro cruzado. Jugada espectacular. Segundos después Losada, marró su enésima ocasión al enviar un balón al larguero de cabeza y en el contragolpe siguiente Álex, de nuevo, remató a dos metros del guardameta visitante, que sacó con muchos apuros. El último cuarto de hora fue del Celta, que gozó de varias ocasiones de gran claridad. Especialmente descatadas una de Oriol y otra de Álex para llevarse los tres puntos. Pero al final el botín fue de un punto. Si se evalúa la primera mitad, gracias. Si se evalúa la segunda, se perdieron dos.
