El ministro español de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, dijo a Efe que intentará impulsar en el Consejo de Ministros comunitarios de Pesca de hoy las negociaciones de los acuerdos pesqueros con Marruecos y Mauritania.
'Cada vez que tenemos contactos con la comisaria (europea de Pesca) ponemos encima de la mesa todos los intereses pesqueros españoles. En este momento nuestra enorme preocupación es que el acuerdo con Marruecos no se ha renovado, y que en julio vence Mauritania', declaró el ministro a su llegada a la reunión.
Arias Cañete confió en que la Comisión Europea (CE) 'cierre pronto' la renegociación del convenio con Marruecos, ya que el 14 de junio vencen las ayudas que el Gobierno asigna a los pescadores afectados y en caso de que la renovación se demore habrá que 'tratar de renovarlas'.
Sobre el acuerdo con Mauritania, recordó su reciente visita al país, en la que se reunió con las autoridades mauritanas para tratar 'los puntos de encuentro de ese acuerdo'.
Tras la visita, explicó, escribió una carta a la comisaria europea de Pesca, Maria Damanaki, pidiéndole que agilizara las negociaciones, porque hay una flota que depende de ese acuerdo, que es 'el más importante de la UE'.
El pasado 14 de diciembre, el Parlamento Europeo tomó la decisión de no prorrogar el acuerdo de pesca que mantenían de forma provisional la Unión Europea y Marruecos, lo que dejó en casa a un centenar de barcos españoles.
En febrero, el Consejo dio a la CE luz verde para negociar un nuevo pacto que garantice la pesca sostenible y la rentabilidad económica.
El anterior acuerdo pesquero con Marruecos, en vigor desde 2007 hasta finales de febrero de 2011, ofrecía 119 licencias a la flota europea (100 de ellas para España, aunque no se usaban todas, que beneficiaban sobre todo a barcos de Canarias y Andalucía), a cambio de unas compensaciones de 36,1 millones de euros anuales.
Por su parte, el acuerdo pesquero con Mauritania es el más importante para la flota comunitaria, con 110 licencias para los navíos europeos y caduca el 31 de julio, pero las negociaciones entre la CE y Mauritania están estancadas.
