La Fundación da así un paso más en la transformación del agro gallego “en un medio sostenible”
La Fundación Galicia Sustentable presentó ayer en A Laracha (A Coruña) la puesta en marcha de su finca experimental en la parroquia de Montemaior, un novedoso espacio en el que probar tecnologías que “revolucionen” y hagan más sostenibles las actividades del medio rural.
En la presentación de la iniciativa llamada entre otros aspectos a la modernización tecnológica del agro gallego, participaron el presidente de la Fundación Galicia Sustentable, Marcos Pérez Gulín; el ingeniero de telecomunicaciones y director de Gradiant, Fernando Jiménez, y el alcalde de A Laracha, José Manuel López.
La Fundación ya dispone en la zona habilitada en un campo experimental de más de siete hectáreas con ocho fincas que reúnen la biodiversidad a la que se enfrenta el territorio gallego, desde el bosque autóctono a la braña inundable, pasando por una serie de pastos, huerta o plantaciones de eucaliptos. El objetivo, según se dejaba ver ayer en el acto de presentación, es probar “in situ” todas aquellas iniciativas innovadoras que están consiguiendo avances significativos en el desarrollo socioeconómico del medio rural y poder compartir ese conocimiento como palanca competitiva y de progreso.
El proyecto rural emplea tecnología avanzada con la intención de generar una transformación sin precedentes en el medio rural autonómico. En este sentido, la Fundación Galicia Sustentable y el centro Gradiant se unen para la creación de un entorno avanzado en el que experimentar con productos tecnológicos de quinta generación en ámbitos como la logística, sensorización de cultivos o monitorización de ganado. Galicia Sustentable presentó la colaboración con el centro tecnológico ubicado en el Campus Universitario de Vigo, en el desarrollo de proyectos de conectividad y tecnología para reducir la brecha digital aún muy presente en el medio rural, y potenciar el desarrollo tecnológico del sector primario.
Herramientas digitales
Uno de los objetivos en los que se trabaja en las fincas experimentales es el desarrollo de una serie de herramientas digitales respetuosas con el medio ambiente y con una implementación simplificada, en particular en el seguimiento de zonas agrícolas mediante la integración de diferentes sensores remotos, soluciones de bajo consumo, procesamiento de datos a gran escala basados en inteligencia artificial, realidad aumentada o el procesamiento avanzado de imágenes. Esta iniciativa -según se destacaba ayer- incrementará el desarrollo de nuevas posibilidades empresariales en la agricultura o la ganadería. Además, la presencia del centro tecnológico gallego en la Comisión de Agricultura de la Alianza para la Innovación en Internet de las Cosas facilitará la creación de consorcios de I+D+i y la colaboración de carácter internacional.
Modelos piloto de gestión y de negocio para el medio
El de Laracha es el primer gran proyecto de la Fundación, un proyecto en el que la aplicación de tecnología avanzada, en colaboración con el centro Gradiant, es uno de los grandes pilares de un plan iniciado en tiempos precovid, retrasado por la pandemia después, y que ahora comienza a dar sus primeros frutos.
Los proyectos que se llevan a cabo en la finca experimental de la Fundación Galicia Sustentable plantean modelos piloto de gestión y de negocio que mejoran la resiliencia del medio rural.
En esta instalación se trabaja con la convicción de que “el desarrollo y prosperidad de nuestro medio rural es el mejor camino para la sostenibilidad”, lo que, según consideran desde la Fundación, “pone en valor a la generación actual, como capaz de revertir el deterioro y degradación medioambiental de nuestro planeta”.
Según se destacaba ayer, “la amenaza del cambio climático es una realidad que pondrá en peligro cosas tan esenciales como la cadena de suministro primario”.
