La reunión entre el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, y los gobernantes regionales del PP ha concluido sin ningún acuerdo sobre el reparto del déficit, aunque el presidente ha pedido a sus barones un margen de un mes para seguir negociando los criterios que, en todo caso, serán objetivos y no políticos.
Esos han sido los únicos resultados concretos de un encuentro que había provocado mucha expectación ante las diferencias expresadas por los presidentes autonómicos del PP, y del que finalmente todos se han ido sin cambiar un ápice su postura.
Los partidarios de un reparto asimétrico siguen siendo los mismos y tampoco han cambiado de opinión los que reclamaban que el techo de déficit sea común para todas las comunidades.
No se ha hablado de cifras, según fuentes de Moncloa, que han confirmado que en la reunión, a la que también ha asistido el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se ha acordado seguir negociando el reparto del déficit autonómico durante todo el mes de junio.
Rajoy y Montoro, no han puesto hoy ninguna propuesta sobre la mesa pero les han prometido a los barones del PP que dicho reparto seguirá criterios objetivos y económicos y no políticos y que no habrá pactos bilaterales, sino que el acuerdo se buscará en el próximo Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) que se celebrará a finales de junio o principios de julio.
'Criterios bilaterales o políticos no; económicos y pactados entre todos, sí', ha dicho a los periodistas al término del encuentro el presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijóo.
Cerca de tres horas ha durado el almuerzo de Rajoy con sus barones junto a la cúpula del PP -con la secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal, a la cabeza- y ha habido tiempo para que cada uno de los presidentes autonómicos volviera a defender su postura.
La reunión ha servido para que 'aquello que veníamos hablando a través de los medios de comunicación nos lo pudiéramos decir en una mesa cara a cara', ha admitido al finalizar el presidente de Extremadura, José Antonio Monago, que además muy gráficamente ha aludido a la lluvia que en esos momentos caía en la calle Génova.
'Esperemos que esta pequeña tormenta escampe' de cara al CPFF, ha dicho Monago, uno de los que se oponen a la asimetría en el déficit.
Los presidentes de las comunidades cumplidoras reclaman en cualquier caso compensaciones si dicho déficit diferenciado acaba, como es previsible, imponiéndose.
Una posición que también ha expresado la presidenta del Gobierno de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, quien ha insistido en que 'no puede haber agravios comparativos' para las comunidades que cumplieron con el objetivo de 2012.
Hoy, sin embargo, el objetivo parecía ser dar una 'imagen de unidad' y así, hasta el que más defiende el déficit diferenciado, el presidente valenciano, Alberto Fabra, ha asegurado que lo importante es haber logrado el compromiso de seguir reduciendo el déficit y hacerlo 'todos de la mano'.
Que no era un día para la pelea se ha visto también en las declaraciones del presidente Baleares, Jose Ramón Bauzá, que ha dicho que ha encontrado 'sin ninguna duda' comprensión en sus compañeros para que haya déficits distintos.
Según Bauzá, en la reunión ha quedado claro que en 2013 no habrá un déficit superior al que tuvieron en 2012 las comunidades porque no sería comprensible y perjudicaría a los ciudadanos.
De momento, parece que todos salen contentos y dicen en público que la reunión ha sido útil y productiva, incluidos los más reacios al reparto asimétrico.
Entre ellos está también el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, que dice que se lleva la garantía del Ejecutivo de que ninguna comunidad 'cumplidora' saldrá perjudicada este año y que no habrá ninguna negociación 'bilateral ni por detrás' con Cataluña.
Los partidarios de un reparto asimétrico siguen siendo los mismos y tampoco han cambiado de opinión los que reclamaban que el techo de déficit sea común para todas las comunidades.
No se ha hablado de cifras, según fuentes de Moncloa, que han confirmado que en la reunión, a la que también ha asistido el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se ha acordado seguir negociando el reparto del déficit autonómico durante todo el mes de junio.
Rajoy y Montoro, no han puesto hoy ninguna propuesta sobre la mesa pero les han prometido a los barones del PP que dicho reparto seguirá criterios objetivos y económicos y no políticos y que no habrá pactos bilaterales, sino que el acuerdo se buscará en el próximo Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) que se celebrará a finales de junio o principios de julio.
'Criterios bilaterales o políticos no; económicos y pactados entre todos, sí', ha dicho a los periodistas al término del encuentro el presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijóo.
Cerca de tres horas ha durado el almuerzo de Rajoy con sus barones junto a la cúpula del PP -con la secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal, a la cabeza- y ha habido tiempo para que cada uno de los presidentes autonómicos volviera a defender su postura.
La reunión ha servido para que 'aquello que veníamos hablando a través de los medios de comunicación nos lo pudiéramos decir en una mesa cara a cara', ha admitido al finalizar el presidente de Extremadura, José Antonio Monago, que además muy gráficamente ha aludido a la lluvia que en esos momentos caía en la calle Génova.
'Esperemos que esta pequeña tormenta escampe' de cara al CPFF, ha dicho Monago, uno de los que se oponen a la asimetría en el déficit.
Los presidentes de las comunidades cumplidoras reclaman en cualquier caso compensaciones si dicho déficit diferenciado acaba, como es previsible, imponiéndose.
Una posición que también ha expresado la presidenta del Gobierno de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, quien ha insistido en que 'no puede haber agravios comparativos' para las comunidades que cumplieron con el objetivo de 2012.
Hoy, sin embargo, el objetivo parecía ser dar una 'imagen de unidad' y así, hasta el que más defiende el déficit diferenciado, el presidente valenciano, Alberto Fabra, ha asegurado que lo importante es haber logrado el compromiso de seguir reduciendo el déficit y hacerlo 'todos de la mano'.
Que no era un día para la pelea se ha visto también en las declaraciones del presidente Baleares, Jose Ramón Bauzá, que ha dicho que ha encontrado 'sin ninguna duda' comprensión en sus compañeros para que haya déficits distintos.
Según Bauzá, en la reunión ha quedado claro que en 2013 no habrá un déficit superior al que tuvieron en 2012 las comunidades porque no sería comprensible y perjudicaría a los ciudadanos.
De momento, parece que todos salen contentos y dicen en público que la reunión ha sido útil y productiva, incluidos los más reacios al reparto asimétrico.
Entre ellos está también el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, que dice que se lleva la garantía del Ejecutivo de que ninguna comunidad 'cumplidora' saldrá perjudicada este año y que no habrá ninguna negociación 'bilateral ni por detrás' con Cataluña.
