Los principales sindicatos españoles rechazaron las medidas antidéficit anunciadas por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que calificaron de 'injustas' y de 'golpe duro', y avisaron que se movilizarán, aunque no han convocado una huelga general.
El secretario general de la Unión General de Trabajadores (UGT), Cándido Méndez, dijo que 'con toda probabilidad' se realizarán protestas en las próximas semanas, a lo que luego el líder de Comisiones Obreras (CCOO), Ignacio Fernández Toxo, añadió que las iniciativas merecen 'una contestación masiva en las calles'.
A su vez, el presidente de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-CSIF), Domingo Fernández, anticipó que se analizan acciones legales contra unas medidas 'muy graves' que, según explicó, suponen 'incumplir' el acuerdo alcanzado sobre la función pública, que ya establece una moderación salarial. Fernández dijo que no descarta la convocatoria a una huelga general de trabajadores estatales, aunque sostuvo que hay que pensarlo 'con serenidad y con eficacia'.
Méndez, por su parte, afirmó que las iniciativas significan un 'cambio de escenario en las relaciones con los sindicatos', se declaró convencido de que causarán 'un retraso en la recuperación de la economía y un aumento del paro', y dijo que se trata de 'sacrificios duros que recaen en los de siempre'. Toxo agregó que las medidas que anunció Zapatero en el Congreso 'profundizarán el deterioro de la economía e introducirán riesgos para que haya más destrucción de empleo', y recordó que a estas iniciativas deben añadírseles la subida del IVA a partir de julio y la retirada de 6.045 millones de euros de inversión pública.
La Unión Sindical Obrera (USO), por su parte, instó a CCOO y a UGT a dar de forma unitaria una 'respuesta contundente en la calle' en contra de las medidas que, a su criterio, 'afectan a la parte más débil de la sociedad'. Según USO, el ajuste debería comenzar por eliminar de la Moncloa a los cerca de 700 asesores, reducir el número de ministerios, rebajar las subvenciones a entidades sociales, como patronales, sindicatos o partidos políticos, además de una reforma fiscal en profundidad y la lucha contra el fraude fiscal.
PROFESORES y policías
También el sindicato independiente de la enseñanza ANPE rechaza que se reduzca un 5% el sueldo del colectivo de profesores, y anuncia 'medidas de presión' para defender las retribuciones. ANPE, dice que se reserva el derecho a poner en marcha todas las medidas de presión necesarias y recuerda que este colectivo 'lleva ya' doce años de congelación salarial y que 'no ha tenido nunca acceso a los fondos de pensiones de otros funcionarios'.
El Sindicato Profesional de Policía (SPP) se sumó a las críticas y recordó el sueldo 'inferior' de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía en comparación con otros cuerpos autonómicos (aproximadamente un 30%, según afirma este sindicato) o locales.
A su vez, el presidente de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-CSIF), Domingo Fernández, anticipó que se analizan acciones legales contra unas medidas 'muy graves' que, según explicó, suponen 'incumplir' el acuerdo alcanzado sobre la función pública, que ya establece una moderación salarial. Fernández dijo que no descarta la convocatoria a una huelga general de trabajadores estatales, aunque sostuvo que hay que pensarlo 'con serenidad y con eficacia'.
Méndez, por su parte, afirmó que las iniciativas significan un 'cambio de escenario en las relaciones con los sindicatos', se declaró convencido de que causarán 'un retraso en la recuperación de la economía y un aumento del paro', y dijo que se trata de 'sacrificios duros que recaen en los de siempre'. Toxo agregó que las medidas que anunció Zapatero en el Congreso 'profundizarán el deterioro de la economía e introducirán riesgos para que haya más destrucción de empleo', y recordó que a estas iniciativas deben añadírseles la subida del IVA a partir de julio y la retirada de 6.045 millones de euros de inversión pública.
La Unión Sindical Obrera (USO), por su parte, instó a CCOO y a UGT a dar de forma unitaria una 'respuesta contundente en la calle' en contra de las medidas que, a su criterio, 'afectan a la parte más débil de la sociedad'. Según USO, el ajuste debería comenzar por eliminar de la Moncloa a los cerca de 700 asesores, reducir el número de ministerios, rebajar las subvenciones a entidades sociales, como patronales, sindicatos o partidos políticos, además de una reforma fiscal en profundidad y la lucha contra el fraude fiscal.
PROFESORES y policías
También el sindicato independiente de la enseñanza ANPE rechaza que se reduzca un 5% el sueldo del colectivo de profesores, y anuncia 'medidas de presión' para defender las retribuciones. ANPE, dice que se reserva el derecho a poner en marcha todas las medidas de presión necesarias y recuerda que este colectivo 'lleva ya' doce años de congelación salarial y que 'no ha tenido nunca acceso a los fondos de pensiones de otros funcionarios'.
El Sindicato Profesional de Policía (SPP) se sumó a las críticas y recordó el sueldo 'inferior' de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía en comparación con otros cuerpos autonómicos (aproximadamente un 30%, según afirma este sindicato) o locales.
