Cree que en Europa 'falta política y faltan políticos' ya que los líderes están 'supeditados a sus planes electorales'
El exministro socialista de Economía y Hacienda Carlos Solchaga ha considerado que 'no vendría nada mal' que entre los dos grandes partidos -el que vaya a estar en el Gobierno y el que permanezca en la oposición- encuentren un 'espacio de consenso para tratar temas importantes', entre los que ha citado una reestructuración de funciones en el Estado, una reforma laboral o la reducción del déficit fiscal.
En una rueda de prensa previa a una conferencia que ha impartido en Vigo, invitado por La Caixa, Solchaga ha estimado que 'estaría bien' una búsqueda de consenso para lograr una 'forma de actuar más cooperativa' entre los distintos niveles de la Administración y también para lograr una 'disciplina' en materia de ingresos y gastos fiscales.
También ha considerado que 'ya es hora' de que PP y PSOE se pongan de acuerdo en una 'reforma laboral', considerando que, pese a los intentos del actual Ejecutivo, todavía se está 'lejos' de haberla conseguido.
De igual forma, ha abogado por un 'cierto' consenso en la senda de la reducción del déficit fiscal.
No obstante, ha mantenido que donde no sería necesario un acuerdo sería 'en el tema de los salarios'.
A este respecto, ha precisado que en estos momentos 'no tiene sentido' rebajar todavía más los sueldos de los trabajadores y que 'ahora el problema no es la competitividad, sino salir de la crisis evitando una nueva recesión'.
Preguntado acerca de las medidas que considera que deberá asumir el nuevo Gobierno para salir de la crisis y evitar una nueva recesión, ha indicado que la recesión internacional 'se evita a nivel internacional' y mediante la coordinación de las políticas económicas.
Por ello, estima que a España no le toca plantearse 'cómo evitar la recesión que puede venir encima', sino 'cómo contribuir, junto a los demás', a una política de recuperación económica.
En todo caso, ha advertido de que 'sí le compete (a España) la idea de que no sea por desconfianza, como consecuencia de un mal manejo de la política fiscal o de la deuda pública', que el país contribuya a que la recesión sea 'más grave que en otros lugares' .
Así, ha explicado que al nuevo Gobierno, sea cual sea su signo político, le tocará ir 'en la misma línea' que ha seguido el actual 'a partir del 10 de mayo de 2011' -sobre la etapa anterior afirmó que hubo 'errores de cálculo sobre la crisis y su tratamiento'-, citando la aplicación de medidas como la reducción del déficit, las reformas en pensiones y mercado laboral y la reestructuración del sistema financiero.
Además, ha mantenido que el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero ha tomado medidas importantes que no han sido populares, si bien ha recordado que ello no es 'el mejor pasaporte para las elecciones'.
Así, ha indicado que 'quizá alguien en el futuro diga que Zapatero cuando estuvo a la altura de las circunstancias fue cuando hizo cosas desagradables'.
También ha recordado que en tiempos de crisis los gobiernos 'tienden a ser castigados' en las urnas, aunque ha destacado el 'esfuerzo' del candidato socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, a la hora de 'explicar', al tiempo que le ha deseado 'éxito' en la cita electoral.
EUROPA
Carlos Solchaga ha defendido que 'si hasta hace unos meses' el principal punto para que España se asegurase el no ser intervenida y salir de la crisis de forma 'razonable' residía en lo que hiciesen sus gobiernos, pero que en estos momentos, 'el énfasis de la salida de la crisis' está sobre todo en la UE, en que exista una 'coordinación suficiente' en las políticas económicas, haya acuerdos en los sistemas de rescate de la deuda griega y procedimientos suficientes en previsiones para la liquidez de los bancos.
Si todo ello se cumpliese, el exministro cree que 'los países periféricos podrían salvar la situación', si bien a largo plazo todavía quedaría un problema 'con mayúsculas'.
Así, ha recordado que pese a haber una única moneda hay '17 políticas fiscales distintas y no coordinadas', una cuestión que Europa debe resolver y que 'le va a costar trabajo'.
También ha incidido en que existe la dificultad de que la 'histeria' de los mercados 'no da el tiempo necesario' para tomar las medidas necesarias.
Por otra parte, también ha destacado que la capacidad de liderazgo y la visión de la construcción de Europa de los líderes actuales 'está subordinada a sus planes electorales' y que, con tal de obtener 'cierta seguridad' en los comicios están 'tratando de evitar decisiones impopulares pero que son indispensables para la salida de la crisis'. Esto le ha llevado a decir que 'falta política y faltan políticos'.
'No es que Goldman Sachs más el otro y el otro estén mandando, no es que exista un contubernio judeo-masónico-marxista mandando, se trata de que los políticos que nos han tocado en este momento no parecen estar a la altura de las circunstancias', ha espetado, al tiempo que ha advertido de que cuando los políticos desaparecen surge el 'sálvese quien pueda' y los oportunistas.
REESTRUCTURACIÓN DEL SISTEMA FINANCIERO
Sobre la reestructuración del sistema financiero, ha estimado que si el problema de la deuda a nivel europeo se resuelve, con las cantidades que tiene previsto el FROB (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria) 'o un poco más', el conjunto del sistema financiero español no debería tener 'problemas graves'.
Así, ha indicado que esto no quiere decir que determinadas cajas no tengan la necesidad de ser intervenidas o, en todo caso, de pasar ciertos 'apuros', si bien ha precisado que 'una cosa es una entidad con un problema y otra que el sistema financiero en su conjunto no sea viable'.
En una rueda de prensa previa a una conferencia que ha impartido en Vigo, invitado por La Caixa, Solchaga ha estimado que 'estaría bien' una búsqueda de consenso para lograr una 'forma de actuar más cooperativa' entre los distintos niveles de la Administración y también para lograr una 'disciplina' en materia de ingresos y gastos fiscales.
También ha considerado que 'ya es hora' de que PP y PSOE se pongan de acuerdo en una 'reforma laboral', considerando que, pese a los intentos del actual Ejecutivo, todavía se está 'lejos' de haberla conseguido.
De igual forma, ha abogado por un 'cierto' consenso en la senda de la reducción del déficit fiscal.
No obstante, ha mantenido que donde no sería necesario un acuerdo sería 'en el tema de los salarios'.
A este respecto, ha precisado que en estos momentos 'no tiene sentido' rebajar todavía más los sueldos de los trabajadores y que 'ahora el problema no es la competitividad, sino salir de la crisis evitando una nueva recesión'.
Preguntado acerca de las medidas que considera que deberá asumir el nuevo Gobierno para salir de la crisis y evitar una nueva recesión, ha indicado que la recesión internacional 'se evita a nivel internacional' y mediante la coordinación de las políticas económicas.
Por ello, estima que a España no le toca plantearse 'cómo evitar la recesión que puede venir encima', sino 'cómo contribuir, junto a los demás', a una política de recuperación económica.
En todo caso, ha advertido de que 'sí le compete (a España) la idea de que no sea por desconfianza, como consecuencia de un mal manejo de la política fiscal o de la deuda pública', que el país contribuya a que la recesión sea 'más grave que en otros lugares' .
Así, ha explicado que al nuevo Gobierno, sea cual sea su signo político, le tocará ir 'en la misma línea' que ha seguido el actual 'a partir del 10 de mayo de 2011' -sobre la etapa anterior afirmó que hubo 'errores de cálculo sobre la crisis y su tratamiento'-, citando la aplicación de medidas como la reducción del déficit, las reformas en pensiones y mercado laboral y la reestructuración del sistema financiero.
Además, ha mantenido que el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero ha tomado medidas importantes que no han sido populares, si bien ha recordado que ello no es 'el mejor pasaporte para las elecciones'.
Así, ha indicado que 'quizá alguien en el futuro diga que Zapatero cuando estuvo a la altura de las circunstancias fue cuando hizo cosas desagradables'.
También ha recordado que en tiempos de crisis los gobiernos 'tienden a ser castigados' en las urnas, aunque ha destacado el 'esfuerzo' del candidato socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, a la hora de 'explicar', al tiempo que le ha deseado 'éxito' en la cita electoral.
EUROPA
Carlos Solchaga ha defendido que 'si hasta hace unos meses' el principal punto para que España se asegurase el no ser intervenida y salir de la crisis de forma 'razonable' residía en lo que hiciesen sus gobiernos, pero que en estos momentos, 'el énfasis de la salida de la crisis' está sobre todo en la UE, en que exista una 'coordinación suficiente' en las políticas económicas, haya acuerdos en los sistemas de rescate de la deuda griega y procedimientos suficientes en previsiones para la liquidez de los bancos.
Si todo ello se cumpliese, el exministro cree que 'los países periféricos podrían salvar la situación', si bien a largo plazo todavía quedaría un problema 'con mayúsculas'.
Así, ha recordado que pese a haber una única moneda hay '17 políticas fiscales distintas y no coordinadas', una cuestión que Europa debe resolver y que 'le va a costar trabajo'.
También ha incidido en que existe la dificultad de que la 'histeria' de los mercados 'no da el tiempo necesario' para tomar las medidas necesarias.
Por otra parte, también ha destacado que la capacidad de liderazgo y la visión de la construcción de Europa de los líderes actuales 'está subordinada a sus planes electorales' y que, con tal de obtener 'cierta seguridad' en los comicios están 'tratando de evitar decisiones impopulares pero que son indispensables para la salida de la crisis'. Esto le ha llevado a decir que 'falta política y faltan políticos'.
'No es que Goldman Sachs más el otro y el otro estén mandando, no es que exista un contubernio judeo-masónico-marxista mandando, se trata de que los políticos que nos han tocado en este momento no parecen estar a la altura de las circunstancias', ha espetado, al tiempo que ha advertido de que cuando los políticos desaparecen surge el 'sálvese quien pueda' y los oportunistas.
REESTRUCTURACIÓN DEL SISTEMA FINANCIERO
Sobre la reestructuración del sistema financiero, ha estimado que si el problema de la deuda a nivel europeo se resuelve, con las cantidades que tiene previsto el FROB (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria) 'o un poco más', el conjunto del sistema financiero español no debería tener 'problemas graves'.
Así, ha indicado que esto no quiere decir que determinadas cajas no tengan la necesidad de ser intervenidas o, en todo caso, de pasar ciertos 'apuros', si bien ha precisado que 'una cosa es una entidad con un problema y otra que el sistema financiero en su conjunto no sea viable'.
