El fiscal ha revelado hoy al tribunal que enjuicia la violación y muerte de Marta del Castillo que ha aparecido un testigo que trasladó de madrugada a Francisco Javier Delgado, hermano del asesino confeso, Miguel Carcaño, hasta el domicilio de la calle León XIII donde se produjo el crimen.
El fiscal ha comunicado a la Sección Séptima de la Audiencia de Sevilla que la Fiscalía ha abierto una investigación ya que un testigo compareció ante la Policía el jueves pasado y dijo haber trasladado 'a primera hora de la madrugada' a Delgado desde la avenida Luis Montoto de la capital sevillana -próxima al bar donde trabajaba- hasta la calle León XIII, donde presuntamente murió Marta.
Las diligencias de investigación para comprobar la veracidad del testimonio estarán concluidas mañana o el miércoles, fecha en la que la Fiscalía dará traslado de su resultado al tribunal con objeto de que el testigo, del que no ha precisado si era un taxista o un ciudadano particular, sea citado la próxima semana.
Delgado, que se enfrenta a ocho años de cárcel como presunto participante en la operación para deshacerse del cuerpo de Marta, ha declarado que durante toda la madrugada del 25 de enero de 2009 no salió del bar donde trabajaba hasta que cerró a las 03.00 horas.
Fuentes de la Fiscalía han comentado a los periodistas que habrá que valorar la tardanza del testigo en revelar lo que conocía y las razones que esgrima para dar credibilidad a su testimonio.
Delgado ha declarado hasta ahora que, tras cerrar su bar a las 03.00 horas de la madrugada, se trasladó en taxi a un pub de la calle Albaida -muy próxima a León XIII- para tomar una copa y desde allí regresó caminando a su domicilio.
La jornada de hoy ha escuchado además, como testigo, al padre del menor apodado el Cuco, condenado por encubrir el crimen, quien ha asegurado que vio a su hijo a las 23.30 horas de la noche del crimen muy cerca de su domicilio y que luego su esposa lo vio en casa a la 1.30 horas.
Ángel R.C. ha declarado que hacia las 23.30 horas del 24 de enero de 2009 vio en el exterior del bar donde trabajaba a su hijo en bici 'y lo mandó para casa', situada en las inmediaciones, porque ya era la hora de recogerse.
A continuación cerró el bar y se fue con su mujer a tomar una copa hasta que a la 1.30 horas regresaron a casa y su esposa entró al dormitorio del menor, como era su costumbre, donde en caso de no haberlo visto se lo habría comentado, según ha dicho.
Esta versión impediría que el Cuco hubiese participado en la desaparición de la joven, ocurrida hacia las 2.00 horas de la siguiente madrugada, según las acusaciones.
La madre del Cuco, Rosalía G.M., por su parte, no ha comparecido y ha aportado un certificado médico pues ayer se cayó y sufrió un esguince de tobillo y un golpe en el hombro.
En contra de lo declarado por otros testigos, Ángel ha afirmado que no vio a su hijo borracho sino 'acalorado' por el trayecto en bicicleta y ha añadido que el Cuco 'todavía se está preguntando por qué Carcaño lo ha metido en este asunto', al implicarlo como participante en el traslado del cadáver.
También han comparecido ante el tribunal dos abogados que asistieron a Samuel Benítez, acusado de participar en la desaparición del cadáver, quienes han declarado que no observaron 'absolutamente ninguna circunstancia' en el sentido de que fuera presionado por la Policía en su primera confesión de haber intervenido en la desaparición de Marta.
Las diligencias de investigación para comprobar la veracidad del testimonio estarán concluidas mañana o el miércoles, fecha en la que la Fiscalía dará traslado de su resultado al tribunal con objeto de que el testigo, del que no ha precisado si era un taxista o un ciudadano particular, sea citado la próxima semana.
Delgado, que se enfrenta a ocho años de cárcel como presunto participante en la operación para deshacerse del cuerpo de Marta, ha declarado que durante toda la madrugada del 25 de enero de 2009 no salió del bar donde trabajaba hasta que cerró a las 03.00 horas.
Fuentes de la Fiscalía han comentado a los periodistas que habrá que valorar la tardanza del testigo en revelar lo que conocía y las razones que esgrima para dar credibilidad a su testimonio.
Delgado ha declarado hasta ahora que, tras cerrar su bar a las 03.00 horas de la madrugada, se trasladó en taxi a un pub de la calle Albaida -muy próxima a León XIII- para tomar una copa y desde allí regresó caminando a su domicilio.
La jornada de hoy ha escuchado además, como testigo, al padre del menor apodado el Cuco, condenado por encubrir el crimen, quien ha asegurado que vio a su hijo a las 23.30 horas de la noche del crimen muy cerca de su domicilio y que luego su esposa lo vio en casa a la 1.30 horas.
Ángel R.C. ha declarado que hacia las 23.30 horas del 24 de enero de 2009 vio en el exterior del bar donde trabajaba a su hijo en bici 'y lo mandó para casa', situada en las inmediaciones, porque ya era la hora de recogerse.
A continuación cerró el bar y se fue con su mujer a tomar una copa hasta que a la 1.30 horas regresaron a casa y su esposa entró al dormitorio del menor, como era su costumbre, donde en caso de no haberlo visto se lo habría comentado, según ha dicho.
Esta versión impediría que el Cuco hubiese participado en la desaparición de la joven, ocurrida hacia las 2.00 horas de la siguiente madrugada, según las acusaciones.
La madre del Cuco, Rosalía G.M., por su parte, no ha comparecido y ha aportado un certificado médico pues ayer se cayó y sufrió un esguince de tobillo y un golpe en el hombro.
En contra de lo declarado por otros testigos, Ángel ha afirmado que no vio a su hijo borracho sino 'acalorado' por el trayecto en bicicleta y ha añadido que el Cuco 'todavía se está preguntando por qué Carcaño lo ha metido en este asunto', al implicarlo como participante en el traslado del cadáver.
También han comparecido ante el tribunal dos abogados que asistieron a Samuel Benítez, acusado de participar en la desaparición del cadáver, quienes han declarado que no observaron 'absolutamente ninguna circunstancia' en el sentido de que fuera presionado por la Policía en su primera confesión de haber intervenido en la desaparición de Marta.
