El Pleno del Congreso aprobó ayer la proposición de ley que, al mismo tiempo que simplifica la papeleta electoral de Senado, modifica la Ley del Tribunal Constitucional para que los magistrados que va a nombrar en noviembre la Cámara Alta vean limitado su mandato a seis años para preservar en el futuro el mandato constitucional de renovación por tercios del Alto Tribunal.
La modificación de la papeleta sábana del Senado, que provocaba más votos nulos que las del Congreso, fue diseñada por una Ponencia de la Cámara Alta y contaba con el respaldo unánime de todos los grupos parlamentarios. Entre otras modificaciones, se reduce el tamaño de la papeleta, elimina la obligación de presentar candidatos por orden alfabético, coloca a los partidos en función de los votos de los anteriores comicios y suprime la mención a los suplentes.
Esa unanimidad se ha roto al incluir en la proposición de ley la reforma de la Ley del TC para acortar el mandato de los magistrados que el Senado tenía pendiente de renovar desde diciembre de 2007 y que se dispone a acometer en noviembre, tras alcanzarse un acuerdo entre los dos grandes partidos.
Dado que la Constitución impone que el TC ha de ser cambiado por tercios y que ahora debe emprenderse la renovación que corresponde al Congreso, los partidos decidieron una reforma urgente de la ley del Tribunal para acortar el mandato de los propuestos por la Cámara Alta. En concreto, la enmienda transaccional introducida establece que 'si hubiese retraso en la renovación por tercios de los magistrados, a los nuevos que fuesen designados se les restará del mandato (nueve años) el tiempo de retraso en la renovación'.
Esa unanimidad se ha roto al incluir en la proposición de ley la reforma de la Ley del TC para acortar el mandato de los magistrados que el Senado tenía pendiente de renovar desde diciembre de 2007 y que se dispone a acometer en noviembre, tras alcanzarse un acuerdo entre los dos grandes partidos.
Dado que la Constitución impone que el TC ha de ser cambiado por tercios y que ahora debe emprenderse la renovación que corresponde al Congreso, los partidos decidieron una reforma urgente de la ley del Tribunal para acortar el mandato de los propuestos por la Cámara Alta. En concreto, la enmienda transaccional introducida establece que 'si hubiese retraso en la renovación por tercios de los magistrados, a los nuevos que fuesen designados se les restará del mandato (nueve años) el tiempo de retraso en la renovación'.
