La directora técnica de Seguridad Nuclear, Isabel Mellado, informó hoy de que el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) detectó ayer por la tarde partículas contaminadas en un camión de chatarra procedente de la central nuclear de Ascó I, que viajó a una chatarrería en Reus.
En cualquier caso, la presidenta del CSN, Carmen Martínez Ten, que este martes se reunión con los alcaldes de la zona de Ascó, garantizó que el riesgo radiológico para la población y el medio ambiente es irrelevante y los controles realizados hasta el momento muestran ausencia de contaminación. Para mayor seguridad, se tiene previsto realizar análisis a entre 1.500 y 1.600 personas que pudieran haber estado sometidas a algún tipo de exposición, el doble de lo previsto inicialmente. Entre ellas se encuentran los escolares que visitaron la central. Las pruebas a los diez primeros de estos estudiantes -en concreto del colegio de los Maristas de Gironarealizadas esta mañana han dado negativas.
Las nuevas partículas radioactivas detectadas en el camión no se han localizado en la chatarra que transportaba. Se trata de partículas mezcladas con tierra y la contaminación es muy parecida a la detectada en áreas exteriores del edificio de Ascó, explicó el director técnico de Protección Radiológica del CSN, Juan Carlos Lentijo, en la conferencia de prensa posterior a la reunión con los alcaldes. En cualquier caso, si se confirma que la contaminación se relaciona con la fuga de la planta que tuvo lugar en noviembre aunque no trascendió hasta abril, se considerará un error que el camión haya salido de Ascó en esas condiciones, agregó Lentijo.
Por cuanto a los análisis, se están realizando mediante un servicio de dosimetría interno de la planta, pero que cuenta con la autorización del CSN que, para mayor seguridad, también está llevando a cabo otros controles directos en colaboración con el CIEMAT a las personas de más riesgo eventual, que se cifran entre 40 y 50. Por cuanto a los escolares y los profesores que fueron de excursión a la central, y pese a que el riesgo de contaminación es muy remoto, explicó Lentijo, porque ni siquiera se bajaron del autobús, los controles se están realizando en Girona por la empresa Tecnaton, supervisados por especialistas del CSN.
Mientras tanto, en las inmediaciones de la planta se están llevando a cabo una campaña específica de calidad radiológica sin que por el momento se hayan detectado anormalidades. También se ha instado a la central a desarrollar un plan de acción para la mejora organizativa y cultura de la seguridad de la central, similar al de Vandellós II, que deberá estar listo en mayo y que será serio, riguroso y ambicioso, dijo Isabel Mellado, directora de Seguridad Nuclear del organismo regulador.
SANCIONES
El mensaje que se insiste en lanzar desde el CSN es, en cualquier caso, tranquilizador. Desde el comienzo de la investigación se han hallado unas 300 partículas radioactivas, pero no se ha detectado ninguna contaminación fuera de la propiedad del titular hasta el momento, indicó Mellado.
El CSN ya ha ha formalizado el acta de inspección, al que el titular de la planta podrá hacer sus alegaciones. Cuando se cierre, el siguiente paso será el proceso de instrucción de la propuesta de expediente sancionador a la central. Ha habido tanto errores operativos como déficit en la información al Consejo por parte del a planta, que ponen de manifiesto debilidades en la cultura de seguridad, señaló Martínez Ten. La directora del CSN, que ha pedido su comparecencia en el Congreso para informar del suceso, advirtió de su intención de utilizar todos los instrumentos legales para sancionar a la empresa en los incumplimientos que haya cometido y en ello valoramos mucho el déficit o transparencia en la información, para insistir en que no ha habido una actitud transparente ni eficiente por parte de la planta, al minimizar la gravedad del suceso. Por el momento días atrás fueron destituidos El director de la planta de Ascó, Rafael Gasca, y el jefe de seguridad, Francesc González.
En su reciente revisión en noviembre, el mecanismo sancionador para estos casos ha multiplicado por diez la cuantía de las multas que pueden aplicarse y que en los casos más graves pueden ascender hasta los 30 millones de euros.
El alcalde de Ascó, Rafael Vidal, que mantuvo esta mañana una reunión con el consejero delegado de Endesa -una de las propietarias de la central, junto a otros sociosy anunció un nuevo marco de relaciones entre la compañía y el ayuntamiento del municipio catalán. Endesa debe ser nuestro mejor vecino, no nuestro enemigo, dijo. También advirtió de que el consistorio reclamará todas las medidas precisas y necesarias para limpiar esta situación.
En la reunión con el CSN también participaron representantes de la Federación de Municipios de Areas Nucleares (AMAC) y alcaldes de Corbera d'Ebre, Flix, Garcia, El Molar, La Palma d4Ebre, La Figuera, La Fatarella, Mora D'Ebre, La Nova, Riba Roja d'Ebre, La Torre de L'Espanyol y Vinebre.
