La Guardia Civil ha decomisado 2,7 toneladas de hachís en El Perelló (Tarragona) y ha detenido a dos ciudadanos búlgaros por un presunto delito de tráfico de drogas, han informado hoy el subdelegado del Gobierno, Jordi Sierra, y el teniente coronel José Aledo.
La operación ha frustrado el desembarco de un alijo de hachís en la llamada punta del Àliga, en la costa de El Perelló, consistente en 84 fardos de hachís con un peso total aproximado de 2.670 kilos.
Se trata de uno de los mayores decomisos de hachís de los últimos años y Aledo lo atribuye a la presión de la vigilancia, que provoca a su vez que los traficantes prefieren mover cantidades menores "porque creen que pasan más desapercibidos".
El Equipo del Servicio Integral de Vigilancia Exterior de la Comandancia de la Guardia Civil de Tarragona detectó dos embarcaciones de pequeño calado que se acercaban a la costa a poca velocidad, haciendo paradas y giros disuasorios.
Los agentes se desplazaron hasta la zona de playa donde se podrían dirigir las embarcaciones y vieron dos vehículos todoterreno a pie de playa, con el maletero abierto y dos embarcaciones neumáticas cargadas de bultos empaquetados y numerados.
Al ver a los agentes, cuatro individuos se dieron a la fuga, dos consiguieron escapar y los otros dos, dos ciudadanos búlgaros de 40 años, fueron detenidos y ya han pasado a disposición del juzgado número 1 de Tortosa.
Además de los 2.670 kilos de hachís, el Instituto Armado ha decomisado las dos lanchas, un vehículo modelo BMW y tecnología variada, como inhibidores para poder burlar la vigilancia.
