El consejero andaluz de Empleo entre 2000 y 2004, José Antonio Viera, y su sucesor hasta 2010, Antonio Fernández, negaron ayer ante la comisión de investigación del Parlamento andaluz cualquier responsabilidad sobre los ERE aprobados en sus mandatos, que consideraron legales.
Viera y Fernández defendieron la legalidad del convenio marco que firmaron el 17 de julio de 2001, como consejero y viceconsejero, que modificó el sistema de reparto de ayudas existente y que los portavoces del PP, Rafael Carmona, y de IU, Alba Doblas, denunciaron como origen del denominado 'fondo de reptiles'.
Viera sólo admitió posibles 'irregularidades administrativas' en el reparto de estos fondos y, como Fernández, responsabilizó de cualquier ilegalidad a sus subordinados, en especial al director general de Empleo, Francisco Javier Guerrero, en prisión preventiva.
Por su parte, el exviceconsejero de Empleo Justo Mañas que también compareció ayer señaló que el presidente andaluz, José Antonio Griñán, le pidió que investigara a fondo las posibles irregularidades y desveló que se encontró varias veces con él y 'siempre' le hizo 'especial hincapié' en que había que colaborar y realizar una 'averiguación exhaustiva caiga quien caiga'.
Viera sólo admitió posibles 'irregularidades administrativas' en el reparto de estos fondos y, como Fernández, responsabilizó de cualquier ilegalidad a sus subordinados, en especial al director general de Empleo, Francisco Javier Guerrero, en prisión preventiva.
Por su parte, el exviceconsejero de Empleo Justo Mañas que también compareció ayer señaló que el presidente andaluz, José Antonio Griñán, le pidió que investigara a fondo las posibles irregularidades y desveló que se encontró varias veces con él y 'siempre' le hizo 'especial hincapié' en que había que colaborar y realizar una 'averiguación exhaustiva caiga quien caiga'.
