El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, aseguró ayer que las cuchillas colocadas en la valla fronteriza de Ceuta y Melilla 'no son agresivas', sino 'disuasorias' y añadió que las heridas que causan son de carácter 'leve' y 'superficial'. Además, alertó de que las mafias están siguiendo con interés este debate y zanjó que España tiene la 'obligación de controlar sus fronteras', que son las de la Unión Europea.
Fernández Díaz anunció además que aún no recibió una respuesta del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al 'extenso' informe que le remitió Interior la semana pasada 'sobre las concertinas'. 'Lo tiene en su poder y estamos a la espera de la decisión que se adopte en el bien entendido que el presidente conoce perfectamente de lo que estamos hablando, pues él fue ministro del Interior', apuntó.
El ministro del Interior asumió su responsabilidad sobre la colocación de las mismas y aseguró que 'la experiencia' de su Departamento ante 'este elemento de disuasión pasivo' en otras instalaciones como las penitenciarias demuestra que produce 'erosiones leves, superficiales' a quién se aproxima a ellas. 'Lo digo para poner la cosas en su justa medida' añadió al tiempo que recordó de forma tajante que 'ese mismo tipo de concertinas se usan en numerosos países de Europa'. En este sentido, expresó que si se fuese 'coherente con lo que algunos afirman, lo que se debería hacer es disminuir la altura de la valla porque es mayor el daño que causa la caída desde seis metros que la concertina'. 'En la defensa de los Derechos Humanos nadie nos va a ganar', sentenció.
El ministro del Interior asumió su responsabilidad sobre la colocación de las mismas y aseguró que 'la experiencia' de su Departamento ante 'este elemento de disuasión pasivo' en otras instalaciones como las penitenciarias demuestra que produce 'erosiones leves, superficiales' a quién se aproxima a ellas. 'Lo digo para poner la cosas en su justa medida' añadió al tiempo que recordó de forma tajante que 'ese mismo tipo de concertinas se usan en numerosos países de Europa'. En este sentido, expresó que si se fuese 'coherente con lo que algunos afirman, lo que se debería hacer es disminuir la altura de la valla porque es mayor el daño que causa la caída desde seis metros que la concertina'. 'En la defensa de los Derechos Humanos nadie nos va a ganar', sentenció.
