'Soy inocente de lo que se me acusa, estoy muy tranquila y no he robado nada al Ayuntamiento de Marbella, eso está muy claro'. Con estas palabras, la tonadillera Isabel Pantoja se defendió del delito de blanqueo de capitales del que está acusada en una pieza separada del 'caso Malaya' y por el cual comenzó a ser juzgada en la Audiencia de Málaga.
Además, la defensa de la cantante Isabel Pantoja aseguró, en el juicio que se inició ayer, que en este caso se produjeron vulneraciones de derechos fundamentales y comenzó 'sin absolutamente nada, ni indicios ni siquiera una mera sospecha' sobre la conducta de ésta. Así, se refirió a un trato 'degradante' y alegó 'nulidad radical' de actuaciones, poniendo de manifiesto el 'principio inquisitivo general' con el que se inició el caso respecto a su defendida.
La Sección Segunda de la Audiencia malagueña celebró ayerla primera sesión del juicio contra Pantoja, el que fuera alcalde de Marbella (Málaga) y pareja de ésta, Julián Muñoz, la exmujer de éste, Maite Zaldívar, y otras siete personas, cuyos letrados presentaron las cuestiones previas que la Fiscalía Anticorrupción y el Ayuntamiento marbellí -acusación particular- contestarán hoy. Todas las defensas pidieron que el juicio no se celebre hasta que no haya sentencia en el caso 'Malaya'.
Numerosos medios de comunicación esperaron la llegada de los acusados a la Ciudad de la Justicia. Muñoz fue el primero en llegar, sobre las siete y media de la mañana. A las ocho llegó en coche la cantante, vestida de beige, con gafas de sol y acompañada de sus abogados, quien recibió palabras de apoyo de una docena de seguidores. Y a las nueve llegó la exmujer de Muñoz. Ya en la sala de vistas, los tres estuvieron sentados en la misma fila, pero no juntos, sino separados por procesados. El exregidor no paró de mirar una tableta, mientras Pantoja permaneció con el rostro serio toda la sesión.
INTROMISIÓN ILEGÍTIMA
En sus cuestiones previas, el letrado de Pantoja subrayó que 'la investigación que se realizó sobre nuestra defendida excede claramente de un ámbito proporcional en la búsqueda de la noticia críminis y supone una intromisión ilegítima e intolerable en el ámbito personal, familiar, laboral y patrimonial investigado' e indicó que se fue 'sobrepasando ampliamente los derechos normales que permiten una investigación criminal'.
Indicó al Tribunal que en las primeras resoluciones de la causa no se hace referencia a su patrocinada, a pesar de lo cual se realizaron actuaciones de investigación bancaria no sólo sobre ella sino también sobre su hijo, Francisco Rivera, su entorno familiar y laboral y sus sociedades. Además, apuntó que hubo un secreto de sumario 'absolutamente innecesario', otro aspecto para considerar que se trata, dijo, de 'una causa general inquisitoria'.
También alegó la vulneración de derechos fundamentales en cuanto a la detención de su defendida, con unos informes policiales presentados el mismo día, por lo que indicó que 'estaba acordada de antes'. Además, cuestionó el informe policial realizado sobre el patrimonio de la tonadillera, para destacar 'lo grosero e incierto' del contenido.
Por su parte, la defensa del exalcalde de Marbella (Málaga) Julián Muñoz solicitó al tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia de Málaga, encargado del enjuiciamiento, que se suspenda el juicio hasta que haya sentencia firme del caso 'Malaya'. Las demás defensas, también la de la cantante, se adhirieron a esta cuestión.
La Sección Segunda de la Audiencia malagueña celebró ayerla primera sesión del juicio contra Pantoja, el que fuera alcalde de Marbella (Málaga) y pareja de ésta, Julián Muñoz, la exmujer de éste, Maite Zaldívar, y otras siete personas, cuyos letrados presentaron las cuestiones previas que la Fiscalía Anticorrupción y el Ayuntamiento marbellí -acusación particular- contestarán hoy. Todas las defensas pidieron que el juicio no se celebre hasta que no haya sentencia en el caso 'Malaya'.
Numerosos medios de comunicación esperaron la llegada de los acusados a la Ciudad de la Justicia. Muñoz fue el primero en llegar, sobre las siete y media de la mañana. A las ocho llegó en coche la cantante, vestida de beige, con gafas de sol y acompañada de sus abogados, quien recibió palabras de apoyo de una docena de seguidores. Y a las nueve llegó la exmujer de Muñoz. Ya en la sala de vistas, los tres estuvieron sentados en la misma fila, pero no juntos, sino separados por procesados. El exregidor no paró de mirar una tableta, mientras Pantoja permaneció con el rostro serio toda la sesión.
INTROMISIÓN ILEGÍTIMA
En sus cuestiones previas, el letrado de Pantoja subrayó que 'la investigación que se realizó sobre nuestra defendida excede claramente de un ámbito proporcional en la búsqueda de la noticia críminis y supone una intromisión ilegítima e intolerable en el ámbito personal, familiar, laboral y patrimonial investigado' e indicó que se fue 'sobrepasando ampliamente los derechos normales que permiten una investigación criminal'.
Indicó al Tribunal que en las primeras resoluciones de la causa no se hace referencia a su patrocinada, a pesar de lo cual se realizaron actuaciones de investigación bancaria no sólo sobre ella sino también sobre su hijo, Francisco Rivera, su entorno familiar y laboral y sus sociedades. Además, apuntó que hubo un secreto de sumario 'absolutamente innecesario', otro aspecto para considerar que se trata, dijo, de 'una causa general inquisitoria'.
También alegó la vulneración de derechos fundamentales en cuanto a la detención de su defendida, con unos informes policiales presentados el mismo día, por lo que indicó que 'estaba acordada de antes'. Además, cuestionó el informe policial realizado sobre el patrimonio de la tonadillera, para destacar 'lo grosero e incierto' del contenido.
Por su parte, la defensa del exalcalde de Marbella (Málaga) Julián Muñoz solicitó al tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia de Málaga, encargado del enjuiciamiento, que se suspenda el juicio hasta que haya sentencia firme del caso 'Malaya'. Las demás defensas, también la de la cantante, se adhirieron a esta cuestión.
