El coordinador general de Izquierda Unida (IU), Gaspar Llamazares, reconoció que su organización se enfrenta actualmente a un 'tiempo económico de austeridad pero no de penuria', y subrayó que la viabilidad parlamentaria y económica después del 9-M 'va avanzando, aunque sea de forma modesta', gracias a la conformación del grupo técnico junto a ERC. Además, agregó que IU sigue siendo un proyecto político 'vivo, aunque dolorido y en algunos casos demediado', por lo que reclamó 'valentía' para afrontar el futuro.
Durante su intervención inicial en el Consejo Político Federal que IU celebra esta mañana -con 131 miembros acreditados-, planteó que IU sigue siendo un 'proyecto vivo aunque dolorido y en algunos casos demediado'. Por eso, reclamó que todos sus miembros aborden 'con valentía un proceso de recomposición interna, rectificación de errores y convocatoria a la sociedad española y el conjunto de la izquierda'. 'Queremos abrirnos para mejorar y cambiar', añadió.
Según dijo, la Dirección Federal reconoció tras el resultado electoral la 'situación de urgencia', y para ello se crearon organismos unitarios, con un gobierno de unidad del proceso asambleario. Acerca de la Asamblea, que se celebrará previsiblemente a mediados de noviembre, señaló que debe ser 'de recomposición interna, de unidad, y para actualizar la línea política y convocar un proceso constituyente en la izquierda', para 'recomponer' IU desde el punto de vista político y al mismo tiempo abriéndose 'al conjunto de la izquierda para revitalizar el proyecto'.
Llamazares explicó que IU ha adecuado su línea política a la nueva legislatura para hacer frente a un Gobierno del PSOE que 'gira al centro'. Por eso, insistió en que votarán en contra del decreto que pretende responder a la crisis, por 'ser un giro más a la derecha', no porque IU no crea 'que es necesario tomar medidas'. A su juicio, el Gobierno 'sigue mirando hacia otra parte ante la gravedad y efectos de la crisis, con una política continuista con recetas neoliberales'.
Frente a las propuestas del Gobierno, Llamazares indicó que IU 'apuesta por dedicar una parte del presupuesto público a luchar contra el fraude y mejorar la progresividad fiscal, proteger a los desempleados y garantizar recolocaciones con políticas activas y pasivas de empleo, contribuir al cambio de modelo de desarrollo y converger con la UE en gasto social'.
Volviendo sobre el resultado electoral, reconoció la 'severidad' de la derrota política, que 'no se debe solamente a condiciones externas', ya que la organización, según dijo, cometió 'errores' y tiene 'insuficiencias en el proyecto' que hay que 'rectificar'. Para ello, apuntó, ahora 'abre un debate sobre la línea política, alianzas, modelo organizativo y dirección colectiva'.
En este sentido, consideró 'muy importante' que la Asamblea IU la haga 'con la sociedad, con foros abiertos y también con los movimientos sociales', para que la izquierda política y social se pregunte sobre lo que le 'ocurre y lo que tiene que cambiar'. Abogó por un 'proceso rigurosamente democrático y de foro participativo con la izquierda para retomar, relanzar, constituir de nuevo el proyecto político de IU'.
Finalmente, inscribió 'el resultado de IU en el contexto de la izquierda transformadora europea', y volvió a cargar contra el sistema electoral español. 'Hemos perdido el 20 por ciento del electorado pero casi el 70 por ciento de la representación institucional. El bipartidismo, la política del miedo y el sistema electoral son un dogal muy importante para IU', sentenció.
Según dijo, la Dirección Federal reconoció tras el resultado electoral la 'situación de urgencia', y para ello se crearon organismos unitarios, con un gobierno de unidad del proceso asambleario. Acerca de la Asamblea, que se celebrará previsiblemente a mediados de noviembre, señaló que debe ser 'de recomposición interna, de unidad, y para actualizar la línea política y convocar un proceso constituyente en la izquierda', para 'recomponer' IU desde el punto de vista político y al mismo tiempo abriéndose 'al conjunto de la izquierda para revitalizar el proyecto'.
Llamazares explicó que IU ha adecuado su línea política a la nueva legislatura para hacer frente a un Gobierno del PSOE que 'gira al centro'. Por eso, insistió en que votarán en contra del decreto que pretende responder a la crisis, por 'ser un giro más a la derecha', no porque IU no crea 'que es necesario tomar medidas'. A su juicio, el Gobierno 'sigue mirando hacia otra parte ante la gravedad y efectos de la crisis, con una política continuista con recetas neoliberales'.
Frente a las propuestas del Gobierno, Llamazares indicó que IU 'apuesta por dedicar una parte del presupuesto público a luchar contra el fraude y mejorar la progresividad fiscal, proteger a los desempleados y garantizar recolocaciones con políticas activas y pasivas de empleo, contribuir al cambio de modelo de desarrollo y converger con la UE en gasto social'.
Volviendo sobre el resultado electoral, reconoció la 'severidad' de la derrota política, que 'no se debe solamente a condiciones externas', ya que la organización, según dijo, cometió 'errores' y tiene 'insuficiencias en el proyecto' que hay que 'rectificar'. Para ello, apuntó, ahora 'abre un debate sobre la línea política, alianzas, modelo organizativo y dirección colectiva'.
En este sentido, consideró 'muy importante' que la Asamblea IU la haga 'con la sociedad, con foros abiertos y también con los movimientos sociales', para que la izquierda política y social se pregunte sobre lo que le 'ocurre y lo que tiene que cambiar'. Abogó por un 'proceso rigurosamente democrático y de foro participativo con la izquierda para retomar, relanzar, constituir de nuevo el proyecto político de IU'.
Finalmente, inscribió 'el resultado de IU en el contexto de la izquierda transformadora europea', y volvió a cargar contra el sistema electoral español. 'Hemos perdido el 20 por ciento del electorado pero casi el 70 por ciento de la representación institucional. El bipartidismo, la política del miedo y el sistema electoral son un dogal muy importante para IU', sentenció.