El juez José Silva advirtió ayer de que 'en cualquier momento' contará 'la película desde el principio' del caso por el que ordenó encarcelar al expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa, lo que generará 'una situación insostenible'.
En una rueda de prensa, Silva consideró que la causa que abrió contra él el Tribunal Superior de Justicia de Madrid a instancias de la Fiscalía, por delitos de prevaricación, contra la libertad individual y retraso malicioso en su investigación al exbanquero 'no puede salir gratis' porque está basada en 'mentiras' y 'falta a la verdad'. 'Mi instrucción es correcta, roza la perfección y no he cometido ningún error, ni siquiera procesal', dijo Silva, que añadió que 'cada día' piensa que fue 'más acertado' enviar a prisión a Blesa, mientras que la Audiencia de Madrid, que al anular el caso del crédito de 26,6 millones de euros a Marsans le dejó en libertad, deberá plantearse que causó 'un daño impresionante'.
UN 'RELATO COMPLETO'
Preguntado por si piensa 'tirar de la manta', explicó que 'ahora no es el momento, pero en cualquier momento puede ser el momento'. Además, añadió que si la ciudadanía tuviera un 'relato completo de cómo en los últimos 15 años se gestionaron las cajas de ahorros, el sistema institucional no lo soportaría', ya que 'desgraciadamente, comprobaría el tipo de alianzas en que se pueden producir entre los corruptos', alertó.
El juez hizo estas declaraciones acompañado de sus abogados, Cándido Conde-Pumpido y Gonzalo Boyé, que anunciaron que presentaron una queja en la Fiscalía del Estado y ante la Defensora del Pueblo contra el fiscal jefe de Madrid, Manuel Moix.
En su opinión, se trata de un auto 'manifiestamente injusto' porque 'no hay un punto que diga la verdad' y se dictó sin 'practicar pruebas indispensables', especialmente la de dar acceso a sus defensa al contenido de más de 8.000 correos electrónicos en los que se basó para ordenar encarcelar a Blesa en dos ocasiones.
El magistrado se mostró 'contento' de volver a su Juzgado, sitio del que 'nunca' se le debió apartar, tras una sanción de cuatro meses y siete días de suspensión.
UN 'RELATO COMPLETO'
Preguntado por si piensa 'tirar de la manta', explicó que 'ahora no es el momento, pero en cualquier momento puede ser el momento'. Además, añadió que si la ciudadanía tuviera un 'relato completo de cómo en los últimos 15 años se gestionaron las cajas de ahorros, el sistema institucional no lo soportaría', ya que 'desgraciadamente, comprobaría el tipo de alianzas en que se pueden producir entre los corruptos', alertó.
El juez hizo estas declaraciones acompañado de sus abogados, Cándido Conde-Pumpido y Gonzalo Boyé, que anunciaron que presentaron una queja en la Fiscalía del Estado y ante la Defensora del Pueblo contra el fiscal jefe de Madrid, Manuel Moix.
En su opinión, se trata de un auto 'manifiestamente injusto' porque 'no hay un punto que diga la verdad' y se dictó sin 'practicar pruebas indispensables', especialmente la de dar acceso a sus defensa al contenido de más de 8.000 correos electrónicos en los que se basó para ordenar encarcelar a Blesa en dos ocasiones.
El magistrado se mostró 'contento' de volver a su Juzgado, sitio del que 'nunca' se le debió apartar, tras una sanción de cuatro meses y siete días de suspensión.
