El presidente del PNV de Bizkaia, Andoni Ortuzar, ha declarado hoy a Efe que al suspender la reunión para el traspaso de poderes en el Gobierno Vasco el PSE-EE 'parece que se comporta como si las elecciones no se hubieran celebrado'.
Ortuzar ha asegurado que al PNV le 'gustaría' retomar el diálogo con el Gobierno Vasco y el PSE-EE para hacer una transición 'lo más ordenada y constructiva posible'.
'La reunión no la suspendimos nosotros y si se nos convoca volveremos a ir', aunque desconoce si ha habido nuevos contactos para ello desde ayer, ha afirmado.
Después de recalcar que el traspaso de poderes 'real' se producirá en cada área cuando sean nombrados los nuevos consejeros, ha explicado que el PNV deseaba realizar una fase 'previa' de encuentros para 'retomar la actividad política, parlamentaria y gubernativa, con más fuerza y acortando plazos'.
'Nosotros queríamos, tras una legislatura especial y caracterizada por la tensión entre el Partido Socialista y el PNV, una fase previa para que ese traspaso de poderes pudiera ser más eficaz', ha añadido.
Ortuzar ha reprochado a los socialistas que se comporten como si no se hubieran celebrado las elecciones, ya que 'llevan todos los temas a una tensión' excesiva y en el Gobierno Vasco 'siguen la actividad' sin asumir que 'dentro de pocas fechas no van estar en Gobierno y su responsabilidad será la de dejar paso a quien ha ganado las elecciones'.
En cuanto a la decisión sobre pagar o no la extra de Navidad a los funcionarios vascos, Ortuzar ha comentado que esa decisión le corresponde tomarla al actual Ejecutivo en funciones porque el cierre de las nóminas se produce el 10 de diciembre.
El dirigente nacionalista ha apuntado que pagar la extra navideña, según los servicios jurídicos de instituciones donde gobierna el PNV, podría suponer la inhabilitación de los funcionarios que firmen esas nóminas, por lo cual se negarán a hacerlo.
No obstante, ha asegurado que si el Gobierno Vasco o la Diputación de Gipuzkoa les presentan informes que demuestren que es legal abonarla estarían 'encantados' y estudiarían 'con gusto el cambio de nuestra posición'.
Ante esa situación, ha defendido que 'adelantar la paga es el mal menor, una buena solución que no compromete más que en unos pocos días el poder adquisitivo de los funcionarios y no lo hace irreversible y dentro de un par de dos o tres años, cuando la situación mejore, se puede llegar a una negociación sobre cómo aflorar estos importes'.
'La reunión no la suspendimos nosotros y si se nos convoca volveremos a ir', aunque desconoce si ha habido nuevos contactos para ello desde ayer, ha afirmado.
Después de recalcar que el traspaso de poderes 'real' se producirá en cada área cuando sean nombrados los nuevos consejeros, ha explicado que el PNV deseaba realizar una fase 'previa' de encuentros para 'retomar la actividad política, parlamentaria y gubernativa, con más fuerza y acortando plazos'.
'Nosotros queríamos, tras una legislatura especial y caracterizada por la tensión entre el Partido Socialista y el PNV, una fase previa para que ese traspaso de poderes pudiera ser más eficaz', ha añadido.
Ortuzar ha reprochado a los socialistas que se comporten como si no se hubieran celebrado las elecciones, ya que 'llevan todos los temas a una tensión' excesiva y en el Gobierno Vasco 'siguen la actividad' sin asumir que 'dentro de pocas fechas no van estar en Gobierno y su responsabilidad será la de dejar paso a quien ha ganado las elecciones'.
En cuanto a la decisión sobre pagar o no la extra de Navidad a los funcionarios vascos, Ortuzar ha comentado que esa decisión le corresponde tomarla al actual Ejecutivo en funciones porque el cierre de las nóminas se produce el 10 de diciembre.
El dirigente nacionalista ha apuntado que pagar la extra navideña, según los servicios jurídicos de instituciones donde gobierna el PNV, podría suponer la inhabilitación de los funcionarios que firmen esas nóminas, por lo cual se negarán a hacerlo.
No obstante, ha asegurado que si el Gobierno Vasco o la Diputación de Gipuzkoa les presentan informes que demuestren que es legal abonarla estarían 'encantados' y estudiarían 'con gusto el cambio de nuestra posición'.
Ante esa situación, ha defendido que 'adelantar la paga es el mal menor, una buena solución que no compromete más que en unos pocos días el poder adquisitivo de los funcionarios y no lo hace irreversible y dentro de un par de dos o tres años, cuando la situación mejore, se puede llegar a una negociación sobre cómo aflorar estos importes'.
