Manifestantes al volante de un centenar y medio de vehículos condujeron este domingo por las calles de Santiago de Compostela convocados por el BNG para reclamar el levantamiento de los peajes de la principal autopista gallega, la AP-9, y la transferencia de competencias a la Xunta.
La manifestación, similar a otras celebradas en otras ciudades gallegas, fue liderada por el diputado del BNG Nestor Rego, el único representante de la formación nacionalista gallega en el Congreso de los Diputados.
Rego, acompañado de la concejala del BNG en el Ayuntamiento de Santiago de Compostela Goretti Sanmartín, reprochó al Gobierno central la falta de implementación de la "gratuidad" entre Vigo y Redondela y de las "rebajas" en algunos tramos, como parte de un compromiso contraído con el BNG.
Al término de la manifestación, el diputado indicó a un grupo de periodistas que "no hay razón para la demora" de aplicación de esas medidas, que deberían haber entrado en vigor, según él, el pasado 1 de enero.
En ese sentido, reprochó al ministro de Transportes, José Luis Ábalos, que en su respuesta a una pregunta del BNG esta semana sobre esas medidas, se comprometió a aplicarlas pero "evitó la concreción de cuando deben entrar en vigor".
Rego consideró que el Gobierno central debe negociar cuanto antes con la firma concesionaria Audasa para establecer un decreto de aplicación de esas bonificaciones.
Sin embargo, Rego señaló que la ambición del BNG va más allá y reclama "una AP-9 sin peajes" por considerar que mientras la mayor parte acabarán su explotación privada en los próximos dos años, "solo quedan en el Estado español tres autopistas con concesión de larga duración de 75 años, dos de ellas en Galicia", entre ellas también la AP-53.
Así, puntualizó que de no tomarse medidas, Audasa podría continuar la explotación de la AP-9 hasta 2048 y consideró que "no está justificado", porque supone un "agravio" para Galicia, atendiendo a que esa arteria de comunicaciones, la principal de Galicia, conecta cinco de las siete ciudades, los tres aeropuertos y los principales puertos marítimos.
El BNG reclama por ello la transferencia de competencias de esa infraestructura y la "gratuidad" de los peajes por considerar que "repercute" en la actividad de las empresas y de su "competitividad" y "afecta al desarrollo social y económico y a las condiciones de vida y el bienestar" de la población.
