La Asociación para a Defensa Ecolóxica de Galicia (Adega) ha denunciado hoy que las granjas de visón americano (neovison vison) que se prohíben en Europa están solicitando permisos de instalación en Galicia, una circunstancia que califica de "alerta biológica".
Los ecologistas informan de que, en el último año, varios países prohibieron la instalación de granjas de esta especie "e incluso establecieron calendarios de cierre", mientras que se registra un "boom de solicitudes" en esta Comunidad autónoma, "incluso en la Red Natura", señalan en un comunicado.
Para Adega, "la espantada hacia Galicia de las peleteras europeas pone en riesgo nuestra biodiversidad".
Así, cita como lugares en los que "brotan" estas solicitudes los municipios de Sobrado, Agolada, A Estrada, Oza dos Ríos, Oia, Forcarey, y otros, frente a la prohibición de países como Holanda, Reino Unido, Alemania, Suiza, Austria y Croacia, que afecta a empresas de capital holandés, británico o finlandés, de las que citan Grislee, Internacional Furs, Celtic Mink o Saga Furs.
En su escrito, Adega recuerda que Galicia ya concentra el 80 por ciento de las granjas de visón americano del Estado, especialmente en las provincias de Pontevedra y A Coruña, por el clima más favorable para la cría de esta especie.
Lamenta, además, que el gran número de instalaciones, las fugas y el alto potencial invasor de la especie llevaron a que el visón americano ya se reproduzca en libertad en Galicia, causando graves daños en la biodiversidad, ya que se trata de un depredador generalista que ocupa múltiples hábitats y compite por los recursos con los carnívoros autóctonos, como la marta, la gineta, la comadreja o la nutria.
Adega denuncia que "Cañete amnistió a especies invasoras por su interés comercial" y, así, recuerda que "nada más llegar al poder, el PP modificó el catálogo español de especies invasoras para amnistiar a la trucha arco iris o al cangrejo americano y permitir su aprovechamiento comercial".
En el caso del visón americano, "y debido a la presión de la industria peletera, se autorizó su cría 'en los territorios donde no compita con el visón europeo'".
Sin embargo, insiste en que "la permisividad con el visón americano", como han señalado científicos conservacionistas, pone en riesgo a otras especies autóctonas en peligro de extinción, como la "galemys pyneraicus" o el phalacrocorax aristotelis, el cormorán cristado, cuyo descenso en las islas Cíes, que pertenecen al Parque Nacional de las Islas Atlánticas, está motivado precisamente por la presencia de este visón.
La asociación ecologista gallega también denuncia que el visón americano puede ser portador de enfermedades como la toxoplasmosis, la enteritis vírica, el botulismo C o la neumonía hemorrágica, que, además de afectar a especies autóctonas como la nutria, pueden contagiarse a las personas.
Por ello, demandan de la Xunta que prohíba nuevas instalaciones y considere las existentes "como de alto riesgo biológico".
Adega concluye que las lamentables condiciones de vida (y muerte) de los visones en las granjas, la amenaza que suponen para la biodiversidad y los costes que ocasiona la erradicación de los animales silvestres, "justifican sobradamente una inmediata moratoria para nuevas solicitudes o ampliación".
