ECONOMÍA

Arranca el juicio contra la antigua cúpula de directivos de NCG

Fernández Gayoso, expresidente de NCG, en el Congreso.
photo_camera Fernández Gayoso, expresidente de NCG, en el Congreso.

La Audiencia Nacional juzga al excopresidente Fernández Gayoso y cinco exmiembros de la entidad

La Audiencia Nacional comenzará a juzgar a partir de hoy a la cúpula de Novacaixagalicia, entre ellos su excopresidente Julio Fernández Gayoso, por el supuesto cobro indebido de 18,9 millones de euros en prejubilaciones, delito por el que la Fiscalía Anticorrupción ha reclamado tres años de prisión.

El juicio se prolongará hasta el viernes con los interrogatorios a los testigos; el 29 y 30 de junio y el 1 de julio será el turno de los peritos, y finalizará el 8 y 9 de ese mes con las conclusiones finales. Además, se sentarán en el banquillo el exdirector general José Luis Pego; el exdirector general adjunto ejecutivo Javier García de Paredes; el antiguo responsable inmobiliario Gregorio Gorriarán; uno de los gestores, Óscar Rodríguez Estrada, y el abogado Ricardo Pradas.

Anticorrupción y NCG Banco reclamaron tres años de prisión para cada uno de los imputados por apropiación indebida y, alternativamente, por estafa, y que devuelvan las cantidades "ilícitamente" percibidas, 18,9 millones.

En su escrito provisional de conclusiones, el fiscal detalla que Pego cobró 7,7 millones de euros; García de Paredes, 5,6 millones; Gorriarán, 4,8 millones y Rodríguez Estrada, 691.261 euros.

Según Anticorrupción, los directivos de Caixanova -Pego, Rodríguez Estrada y Gorriarán- acordaron, con el consentimiento y colaboración principal de Fernández Gayoso, "introducir diversas mejoras económicas en sus contratos de alta dirección". Lo hicieron en mayo de 2010, "con pleno conocimiento" de "la complicada situación de las cajas gallegas y, lógicamente, de la entidad nacida tras su integración".

Ocultación deliberada

Las modificaciones se ocultaron primero a la Comisión de Retribuciones, y después al Consejo de Administración no solo de las cajas sino también de NCG, donde Fernández Gayoso, con la "deliberada intención" de ocultar "las verdaderas reformas e innovaciones", se limitó a exponer que Novacaixa había suscrito tres contratos de alta dirección. En ejecución del "propósito mutuamente concertado de preparar la lucrativa y previsible salida de la entidad, pues tenían pleno conocimiento de la inminente bancarización de la misma", Fernández Gayoso convocó "de forma extemporánea" a la Comisión de Retribuciones para que Pradas explicara los compromisos asumidos hacia los directivos.

Tras ello, el Consejo declaró vigentes los antiguos contratos de alta dirección y aprobó la provisión "en la creencia" de que los conceptos retributivos para los directivos eran los mismos que para el resto de la plantilla y de que no existían cláusulas de blindaje.

El 9 de septiembre de 2011 abandonó Rodríguez Estrada y el 13 Pego y Gorriarán -solo 18 días antes de que el FROB concediera el segundo apoyo financiero de 2.465 millones de euros-, mientras que García de Paredes lo hizo el 19.n

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