Augas de Galicia implantará una red de calidad de aguas y control de vertidos al dominio público hidráulico, denominada red Cave, integrada por 39 estaciones, una actuación a la que dedicará más de 1,3 millones de euros. Esta entidad prevé que los trabajos de instalación concluyan en 27 meses y que las estaciones estén en funcionamiento a finales del próximo verano.
La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas informó en un comunicado de que este mecanismo de control de calidad en tiempo real es pionero en el ámbito territorial de Galicia-Costa, al señalar que, hasta el momento, no se disponía de ningún sistema que permitiese detectar variaciones en los parámetros de calidad de las aguas continentales de la red fluvial.
Las estaciones de la Red Cave se pondrán en marcha en las cuencas de los río Anllóns, Belelle, Eume, Grande, Lagares, Landro, Lérez, Mandeo, Masma, Mero, Mera, Ouro, Sar, Sor, Tambre, Ulla, Umia, Verdugo, Xallas y Xubia.
La empresa adjudicataria del contrato realiza, en la actualidad, las inspecciones precisas para determinar el lugar de instalación de las estaciones.
MEDICIÓN DE PARÁMETROS CADA 10 MINUTOS
Este sistema de estaciones de control dispone de sondas que realizan cada 10 minutos la medición de parámetros de calidad del medio receptor para remitir los datos capturados al Centro de Encausado de Datos instalado en Augas de Galicia.
En este centro se realiza la validación y análisis de los datos obtenidos, que se registran a fin de controlar las posibles variaciones en la calidad. En caso de que el valor de alguno de los parámetros medidos supere al legalmente permitido, el centro de datos emite inmediatamente una alerta de incumplimiento. De este modo se pueden detectar posibles vertidos sin depurar al dominio público hidráulico.
El tiempo transcurrido desde la comunicación del incidente hasta la respuesta técnica por parte de la empresa responsable deberá ser siempre inferior a dos horas.
La densidad de la red fluvial existente en la demarcación hidrográfica Galicia-Costa dificulta su vigilancia de manera continuada por el personal de campo.
Por ello, se instalará un sistema automático de medición en tiempo real de valores de calidad de las aguas superficiales en determinadas áreas estratégicamente seleccionadas para identificar de forma ágil la identificación de contaminación por vertidos de aguas residuales.
Las estaciones de la Red Cave se pondrán en marcha en las cuencas de los río Anllóns, Belelle, Eume, Grande, Lagares, Landro, Lérez, Mandeo, Masma, Mero, Mera, Ouro, Sar, Sor, Tambre, Ulla, Umia, Verdugo, Xallas y Xubia.
La empresa adjudicataria del contrato realiza, en la actualidad, las inspecciones precisas para determinar el lugar de instalación de las estaciones.
MEDICIÓN DE PARÁMETROS CADA 10 MINUTOS
Este sistema de estaciones de control dispone de sondas que realizan cada 10 minutos la medición de parámetros de calidad del medio receptor para remitir los datos capturados al Centro de Encausado de Datos instalado en Augas de Galicia.
En este centro se realiza la validación y análisis de los datos obtenidos, que se registran a fin de controlar las posibles variaciones en la calidad. En caso de que el valor de alguno de los parámetros medidos supere al legalmente permitido, el centro de datos emite inmediatamente una alerta de incumplimiento. De este modo se pueden detectar posibles vertidos sin depurar al dominio público hidráulico.
El tiempo transcurrido desde la comunicación del incidente hasta la respuesta técnica por parte de la empresa responsable deberá ser siempre inferior a dos horas.
La densidad de la red fluvial existente en la demarcación hidrográfica Galicia-Costa dificulta su vigilancia de manera continuada por el personal de campo.
Por ello, se instalará un sistema automático de medición en tiempo real de valores de calidad de las aguas superficiales en determinadas áreas estratégicamente seleccionadas para identificar de forma ágil la identificación de contaminación por vertidos de aguas residuales.
