Beiras pide una reacción ciudadana para erradicar brote epidémico corrupción

El portavoz de Alternativa Galega de Esquerda (AGE), Xosé Manuel Beiras, ha insistido hoy en que es preciso un 'cambio de régimen' para lo que ha pedido a la ciudadanía y a las organizaciones sociales y políticas más sanas que reaccionen para erradicar el brote epidémico de corrupción que azota al país.

Beiras ha respondido de este modo preguntado por las revelaciones del sumario de la operación Pokemon, al que ha preferido no referirse expresamente ya que aún carece de 'una composición de lugar reflexivamente hecha sobre todo lo que está saliendo'.

'Solo hablo cuando tengo elementos de juicio suficientes para decir algo que no sea alimentar culebrones y en este momento no los tengo, más que lo que sé por los medios y no me resulta suficiente', ha indicado.

En cambio, como una reflexión general más amplia, ha dicho que 'hay un problema que viene de muy atrás' y que forma parte de algo que su formación ya ha denunciado y que parece ser que prolifera y continúa.

'Un brote epidémico de corrupción generalizada, que se convierte en el protagonista de la vida social, al menos mediáticamente', ha asegurado Beiras, que ha insistido en que lo que se conoce de la operación Pokemon es 'un síntoma más' que, en su opinión corrobora su diagnosis de hace tiempo, 'que este régimen político está en descomposición, pudriéndose, y todo esto son episodios, nada más'.

Ha llamado la atención sobre 'podredumbres' como los casos Bárcenas, Blesa y Crespo (Gürtel) que van agonizando y ante las que el presidente del Gobierno le dice a la oposición 'que se calle'.

'Pues veréis que es el 'berlusconismo' del estado español, la misma situación. Confío en que haya una reacción de la ciudadanía más sana, de las organizaciones sociales y políticas que tengan el coraje, como la nuestra, de denunciar las cosas apuntando al corazón del problema para que pueda acabar de una vez. Pero solo va a acabar con un cambio de régimen, estoy convencido; no tiene remedio, la epidemia está ahí. Es como la peste de Camus', ha concluido.

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