Un compañero de piso de la acusada de ahogar a su hijo de 9 años en Menorca y abandonar luego su cuerpo en el interior de una maleta ha dicho hoy que, después de que el niño ya no estuviera, puede que la mujer 'estuviera decaída' y que 'quizá la notó un poco nerviosa' cuando le preguntó por él.
El hombre ha declarado hoy en la Audiencia de Palma, a través de una videoconferencia, que mantenía una relación superficial con la acusada, Mónica J.F., por lo que no la conocía lo suficiente como para saber con seguridad si su estado de ánimo había cambiado después de que el niño, supuestamente, volviera a Galicia con sus abuelos, según le comentó.
Una amiga de Mónica de cuando ésta vivía en Noia (A Coruña) la ha descrito como una 'buena madre' y ha reconocido que recibió mensajes suyos entre el 12 de julio y el 7 de noviembre de 2008, presuntamente posteriores a la muerte del niño, en los que la acusada le contaba que el niño estaba 'muy bien' y que había hecho la comunión.
Mónica Juanatey Fernández se enfrenta a una pena de 20 años de cárcel por haber ahogado en la bañera de su casa al menor, César, en el verano de 2008, unos hechos que reconoció ante la policía y el juez de instrucción tras ser detenida en el año 2010, cuando se halló la maleta con el cuerpo del pequeño.
Una amiga de Mónica de cuando ésta vivía en Noia (A Coruña) la ha descrito como una 'buena madre' y ha reconocido que recibió mensajes suyos entre el 12 de julio y el 7 de noviembre de 2008, presuntamente posteriores a la muerte del niño, en los que la acusada le contaba que el niño estaba 'muy bien' y que había hecho la comunión.
Mónica Juanatey Fernández se enfrenta a una pena de 20 años de cárcel por haber ahogado en la bañera de su casa al menor, César, en el verano de 2008, unos hechos que reconoció ante la policía y el juez de instrucción tras ser detenida en el año 2010, cuando se halló la maleta con el cuerpo del pequeño.
