La Agencia Gallega de Infraestructuras (AGI) ha celebrado hoy la primera reunión de su consejo rector, presidido por el conselleiro del ramo, Agustín Hernández, por lo que empieza su 'andadura' con un presupuesto de gasto de 665 millones para impulsar la obra pública en Galicia.
Hernández, acompañado por la directora del nuevo ente, Ethel Vázquez, ha presentado en rueda de prensa los primeros presupuestos de la AGI, un 8 % superiores a la inversión realizada en 2011, de los que podrá disponer gracias a herramientas como el pago aplazado por 210,5 millones en colaboración con el sector financiero privado y la movilización de anualidades en la Sociedad Pública de Inversión por más de 186 millones, ha precisado.
De esta manera, la agencia podrá mantener el nivel de inversión y la ejecución de las obras a pesar que de comenzará a funcionar en enero de 2012 con un 'escenario desfavorable', pero a partir de la promoción de la coordinación y la gestión en materia de infraestructuras, que asumía una Dirección General que la agencia pasa a tutelar, en ambos casos bajo el liderazgo de Vázquez.
Esta entidad pública instrumental, que asume las fusionadas Aceousa y la Sociedad Pública de Inversión (SPI), supondrá un ahorro anual superior al millón de euros en gasto corriente, y, bajo la presidencia y el consejo rector -integrado por un presidente (Hernández), un vicepresidente (Vázquez) y cuatro vocales (de Presidencia, Hacienda y Medio Ambiente), se estructura en cuatro subdirecciones: Planificación, Obras, Seguridad Vial y Contratación.
Los presupuestos de gasto de la AGI para 2012 destinan 7,4 millones (+8%) a transferencias corrientes (subvención de peajes); 251 millones (-5%) a inversiones reales; sociedad pública de inversiones 186,4 millones (-7%); concesiones de obra pública (obra civil que se ejecutará con concesiones), 210 millones (+64%); y transferencias de capital 10,4 millones.
De esta manera, del total de estas cuentas, la financiación presupuestaria (Consellería) constará de 268 millones (incluida la subvención de peajes), mientras que la extrapresupuestaria (mercado financiero privado: SPI e inversiones en obra pública) ascenderá a 396 millones, un 20% más que el ejercicio anterior.
Bajo los principios de unidad de gestión, funcionalidad y eficacia, eficiencia y austeridad, la nueva AGI blindará con casi 460 millones de euros la continuación de la obra pública en marcha, como es el caso de la autovía de la Costa da Morte, la de Celanova o la variante de Noia, así como la finalización de la Tercera Ronda en A Coruña y la variante de Marín.
Además, invertirá 44,6 millones en seguridad vial (el doble que en 2011), 34,7 en conservación de carreteras, 5,1 en estudios y proyectos y 4,4 en transferencias a entidades locales.
Hernández ha insistido en que, con la puesta en marcha de la AGI, la Xunta del PPdeG cumple un compromiso incluido en su programa electoral basado en la austeridad y la eficiencia y mejorando la estructura administrativa del Ejecutivo gallego.
'Tenemos claro en el Gobierno que los ajustes presupuestarios de hoy son la garantía de las inversiones futuras', ha sostenido el conselleiro, quien ha dicho que la garantía de que en 2012 se ejecute el presupuesto para obras, en colaboración público-privada, es que se mantenga 'el rigor y la austeridad en el gasto público'.
Así, ha continuado, 'no tenemos ninguna obra parada', aunque no ha descartado algún problema más técnico que de pagos, por lo que ha indicado que si hay algún retraso en el pago desde ahora hasta principios de enero 'no deja de ser un pequeño deslizamiento' que es lo que hay en este momento para cumplir el objetivo de déficit.
En este sentido, ha defendido el ejercicio 'realista' de las cuentas para el próximo año y ha agregado que cree que, para entonces, 'no habrá las tensiones en el cierre del presupuesto como consecuencia del reiterado incumplimiento del Gobierno central' en materia de financiación autonómica.
Finalmente, Hernández ha considerado, en relación a las críticas empresariales por el descenso del presupuesto y su deseo de que el nivel de inversión sea mayor, que está pendiente de hablar con el presidente de la patronal, Antonio Fontenla, para explicarle las herramientas con que cuenta.
En todo caso, ha aseverado, 'los empresarios deberán estar de acuerdo en que los ajustes inevitables en los presupuestos para 2012 son la garantía del mantenimiento y sostenibilidad de la obra pública en el futuro'.
