La alerta por fuertes vientos en las provincias de A Coruña y Pontevedra, con especial incidencia en Vigo, se saldó ayer con caídas de ramas, árboles y tejados que provocaron daños en vehículos y algunos cortes de circulación, según fuentes del dispositivo de Emergencias.
En la ciudad olívica hubo un herido leve en el barrio de Coia, mientras que en el estadio de Balaídos una fuerte racha dañó parte de la chapa que cubre la grada de río con gol, que tuvo que ser asegurada por los bomberos.
En la zona de Gran Vía el temporal arrancó a las diez de la mañana de ayer, cuando el temporal comenzaba a remitir, la cubierta de una terraza situada en el último piso de un edificio de nueve plantas. Algunas piezas atravesaron por el aire la calle y cayeron en otro inmueble, mientras que un trozo de unos cincuenta kilos impactaba en siete vehículos.
OTRAS INCIDENCIAS
El viento fue el mayor enemigo de los vigueses durante toda la madrugada del domingo. A las nueve de la noche del sábado, los primeros contenedores tenían que ser colocados en su lugar por agentes de la Policía Local. Una hora después los bomberos eran alertados del desplazamiento de algunas chapas de la cubierta de la grada río gol del estadio, donde se llegaron a levantar piezas de cuatro metros. Poco antes, en Coia un árbol que sucumbía a la fuerza del viento era esquivado por un vehículo. Poco antes de la media noche, y en la misma zona, un hombre de 47 años, identificado como A.C.G., sufría lesiones leves en la cabeza y en una pierna cuando salía de un coche y era alcanzado por algunas ramas de otro árbol que caía al suelo.
En A Coruña, ayer se registró una caída de árbol en la calle Linares Rivas, que obligó a cortar un carril a la circulación de vehículos. Fuentes policiales destacaron que la normalidad quedó restablecida poco después.
En la zona de Gran Vía el temporal arrancó a las diez de la mañana de ayer, cuando el temporal comenzaba a remitir, la cubierta de una terraza situada en el último piso de un edificio de nueve plantas. Algunas piezas atravesaron por el aire la calle y cayeron en otro inmueble, mientras que un trozo de unos cincuenta kilos impactaba en siete vehículos.
OTRAS INCIDENCIAS
El viento fue el mayor enemigo de los vigueses durante toda la madrugada del domingo. A las nueve de la noche del sábado, los primeros contenedores tenían que ser colocados en su lugar por agentes de la Policía Local. Una hora después los bomberos eran alertados del desplazamiento de algunas chapas de la cubierta de la grada río gol del estadio, donde se llegaron a levantar piezas de cuatro metros. Poco antes, en Coia un árbol que sucumbía a la fuerza del viento era esquivado por un vehículo. Poco antes de la media noche, y en la misma zona, un hombre de 47 años, identificado como A.C.G., sufría lesiones leves en la cabeza y en una pierna cuando salía de un coche y era alcanzado por algunas ramas de otro árbol que caía al suelo.
En A Coruña, ayer se registró una caída de árbol en la calle Linares Rivas, que obligó a cortar un carril a la circulación de vehículos. Fuentes policiales destacaron que la normalidad quedó restablecida poco después.
